DIRIGENTES DEL PSC ADMITEN SU INQUIETUD POR EL DISCURSO NACIONALISTA DE MARAGALL

 

 Noticia de I. ANGUERA/ MARÍA A. PRIETO   en “ABC” del 04.06.05

 

 Por su interés y relevancia, he seleccionado la noticia que sigue para incluirla en este sitio web. (L. B.-B.)

 

 BARCELONA. La decisión de las dos corrientes críticas del PSC -«Ágora socialista» y «Socialistas en positivo»- de denunciar la deriva nacionalista de esta formación ha precipitado un debate interno, en el que participan destacados dirigentes del aparato socialista, sobre la necesidad de imprimir un cambio de rumbo en las estrategias y los discursos. Aunque la dirección del PSC resta trascendencia a los movimientos de las dos corrientes críticas -que pretenden llamar la atención del PSOE para que ponga freno a lo que consideran un hermanamiento total del PSC con el mundo nacionalista-, algunos dirigentes del socialismo catalán admiten que el Gobierno de Maragall, bien por propia convicción bien por la influencia de ERC, ha puesto el acento en los asuntos simbólicos e identitarios en detrimento de las políticas sociales.

El secretario de Política Municipal del PSC, presidente de la Diputación de Barcelona y alcalde de L´Hospitalet de Llobregat, Celestino Corbacho, ha sido de los primeros en advertir sobre la situación. Próximo al PSOE y a José Montilla, y con la inmunidad que le otorgan sus holgadas mayorías absolutas en las municipales, Corbacho considera, y así lo ha manifiestado estos días, que el PSC debe empezar a marcar distancias respecto a Esquerra levantando la bandera de las políticas sociales. Como Corbacho, otros dirigentes del área metropolitana subrayan que el debate sobre la reforma del Estatuto lo está contaminando todo, de forma que a los ciudadanos les pasan inadvertidas las políticas sociales que pueda estar llevando a cabo el gobierno de la Generalitat.

El propio Maragall se ha encargado de responder estas críticas argumentando que no se puede separar la reforma social de la reivindicación identitaria porque «un país tiene que saber hacia dónde va» para solucionar sus problemas.

Montilla se desvincula de los críticos

El primer secretario del PSC de Barcelona, Joan Ferran, se desmarcó ayer rotundamente de la postura defendida por las dos plataformas críticas -«en el PSC hay mucha gente que no es nacionalista, pero el manifiesto de estos afiliados no refleja las corrientes internas de la sociedad catalana»- pero reconoció que, al margen de este movimiento, sí existe en el seno del partido una cierta inquietud por el discurso identitario que emana de la gestión del tripartito.

En cualquier caso, los dirigentes consultados lamentan la estrategia de «Ágora socialista» y «Socialistas en positivo» -que agrupan a unos 250 militantes de base- al considerar que sus denuncias sobre las restricciones de los derechos individuales, la persecución del castellano o la ausencia de pluralismo en Cataluña, carecen de fundamento.

El entorno del primer secretario de los socialistas catalanes, José Montilla, negó ayer que el ministro de Industria esté detrás, directa o indirectamente, de los movimientos críticos con el liderazgo de Maragall, mientras que el portavoz esta formación, Miquel Iceta, rechazó responder a las denuncias de unos militantes que, a su juicio, no representan a una parte sustancial del partido.