ASÍ NO PUEDEN SEGUIR LAS COSAS, SR. RAJOY.

Artículo de Vicente A. C. M. en su blog de “Periodista Digital” del 18-2-10

Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web

Con un breve comentario al final:

NADA DE NADA

Luis Bouza-Brey (19-2-10, 23:30)

La verdad no sé qué le pasa al Sr. Rajoy con su actitud de no querer lanzarse con un mensaje claro para exigir la convocatoria de elecciones generales. Su voluntaria ambigüedad al dejar la iniciativa en el Sr. Zapatero, en el PSOE o ¡vaya usted a saber en quién!, deja su discurso, vacío y que no pasa de ser un “brindis al sol”. Sus palabras de que “Las cosas no pueden seguir así y España no podrá aguantar dos años más de gobierno socialista” no van seguidas de ninguna acción concreta para evitarlo, evidenciando su falta de valor para tomar una decisión simple que es la que esperan la mayoría de los ciudadanos, al menos los que votaron al PP.

El Sr. Rajoy vuelve a retratarse como un estupendo torero de salón, pero que es incapaz de salir al ruedo real y enfrentarse con el Mihura. Y así sí que no pueden seguir las cosas si usted, Sr. Rajoy, tiene alguna esperanza en querer ser la alternativa que España necesita. Porque lo que España no puede permitirse son otros dos años de una oposición tan resignada a seguir siéndolo. No basta con denunciar que las cosas van mal y que el Gobierno lo está haciendo mal. Hay que mantener una actitud de firmeza y continuada para acaudillar el rechazo popular. Y eso se hace usando todos los elementos democráticos necesarios, incluyendo las manifestaciones y concentraciones populares en toda España. La calle sigue siendo el espacio para que los ciudadanos se expresen en libertad.

Pero parece que la resignación y la actitud de esperar lo inevitable son sus equivocadas estrategias, muy acordes con su carácter pusilánime, apocado y de extrema timidez política que evidencia en sus comparecencias públicas. Una cara bien distinta de la que muestra cuando sube al estrado de oradores del Congreso, donde parece interpretar un papel que le viene demasiado grande. Quizás por eso la pregunta que usted hizo a la bancada socialista ayer, se la debería hacer a su propia bancada respecto a su liderazgo en un PP que resulta irreconocible y patético en sus formas.

Es lamentable que hayan tenido que ser otras voces como las de ERC o las de UPyD las que pidieran la convocatoria de elecciones generales como paso previo y necesario para forzar un cambio de rumbo y una posibilidad de poder salir de la crisis. Una crisis que no solo es económica, sino que además es de valores y que afecta a la esencia misma de España como Nación. Una España que está muy lejos de tener una verdadera democracia. Una España que está dominada por una casta política mediocre y burocratizada, que solo busca su supervivencia y el mantenimiento de sus prebendas.

Y usted Sr. Rajoy, si de verdad quisiera cambiar esta situación, pondría un mínimo de esfuerzo para conseguirlo. Pero lo realmente vergonzoso es que ni usted ni sus asesores, ni sus colaboradores ni camaradas, quieren otra cosa que ser una alternancia en el poder y compartirlo y disputarlo en un “tuya – mía” que demuestra la corrupción de un sistema que terminará por desaparecer. Aunque, eso es mucho esperar de un pueblo al que ustedes se han esforzado en separar y enfrentar con la creación de pequeñas taifas territoriales.

Usted Sr. Rajoy no se merece ser el Presidente del Gobierno de España porque no está luchando por ello. Usted Sr. Rajoy, se limita a esperar su oportunidad lanzando piedras y escondiendo la mano, aparentando lo que no es. Usted Sr. Rajoy carece de la altura política para liderar siquiera su partido y de la confianza de muchos que le votamos en un momento.

Hace tiempo que, como Liberal, me siento fuera de ese partido y solo espero que otros que coincidan con mi ideología le tomen la palabra y se vayan del PP ofreciendo a los ciudadanos una verdadera alternativa y un verdadero proyecto nacional y no el clon del PSOE que es el PP actual.

Breve comentario final:

NADA DE NADA

Luis Bouza-Brey (19-2-10, 23:30)

Patético: ni Pacto de Estado, ni moción de censura, ni elecciones anticipadas, ni votación de confianza, ni dimisión… una cosa es que Rajoy no pueda ganar una moción de censura, ni deba caer en la trampa de aceptar al pirómano como capitán de los bomberos, ni pueda decidir presentar una cuestión de confianza, ni pueda dimitir por Zapatero, ni pueda retirar el apoyo parlamentario del PSOE a ZP, y otra cosa es que no haga nada más que esperar pasivamente mientras España agoniza económica y políticamente.

La moción de censura constructiva, que exige 176 votos a favor del candidato alternativo presentado en la misma, está hecha para que sea muy difícil ganarla, y por ello es muy poco frecuente, presentándose solamente en situaciones de emergencia nacional…como la actual. Por tanto, primer mecanismo desechado por cobardía.

La convocatoria de elecciones anticipadas corresponde al Presidente del Gobierno, pero la petición puede provenir de todos los actores políticos y de la opinión pública: ¿es que el PP tampoco puede iniciar una campaña potente para solicitarla y conseguir que ZP deje la Presidencia del Gobierno? ¿es que también se tiene miedo a pedir elecciones? Conclusión: más inoperancia de la oposición, que también teme utilizar otro de los mecanismos previstos constitucionalmente para cambiar el Gobierno.

La petición de que el PSOE retire su apoyo a ZP sólo puede surtir efecto con la proximidad o resultados de las elecciones autonómicas y locales del próximo año, en las que los barones regionales y locales del PSOE perderán poder. Entonces sí que se pondrán a pensar si ZP les conviene. Pero España habrá perdido otro año y medio.

La Comisión creada por ZP es una artimaña para eludir la responsabilidad de todo lo que ha hecho mal en estos seis años, es decir, de todo. Una artimaña para reducir las culpas y errores del PSOE y su gobierno, mediante su compartición con los demás partidos. El Pacto de Estado es necesario vitalmente para España, pero una vez que ZP haya sido obligado a abandonar el Gobierno, pues ha demostrado sobradamente su incapacidad para gobernar: no ha hecho más que crear problemas sin resolver los previamente existentes. Mientras Zp siga en el Gobierno, el pacto de Estado es imposible. Pero el futuro Gobierno, esté en manos de quién esté, necesitará un amplio apoyo para adoptar las medidas de reforma estructural e institucional necesarias para frenar la degeneración de España y sacarla a flote, corrigiendo el rumbo. El PP y el PSOE necesitarán reforzarse mutuamente para poder gobernar, una vez terminada la era zapatera.

En resumen, el PP debería haber hecho algo más que rechazar la presentación de una moción de censura para volver a sestear a la espera de la debacle del país, que arrastrará a Zapatero. La política seguida por el PP es tan negativa para el país como la del PSOE, pues si éste no gobierna, aquél no se opone al caos ni formula la alternativa. Uno no sabe cuándo ni cómo saldremos del atasco, pero ni el Gobierno ni la oposición serán los autores de una salida no catastrófica para el país.

Pero además, tampoco la solución del pacto con los nacionalistas por parte del PSOE o del PP es tal, pues conduce a la violación de la Constitución y al derrumbe del régimen del 78 y de la democracia española, que recibirá el golpe definitivo de la imposición por la vía de los hechos consumados del golpismo institucional tramado durante los últimos años por la coalición nacional socialista.

Ante tales expectativas de futuro, resultantes de la baja calidad de las élites políticas, no es extraño que los mercados internacionales se retraigan y la economía se hunda. Estamos ante una situación de emergencia nacional en la que no existe ningún actor conocido que pueda reconducirla en dirección a la Regeneración del país. La crisis del sistema parece definitiva y la democracia sólo se salvará si se produce una movilización ciudadana para restablecer la salud pública y la vigencia de los principios constitucionales. Pero esta movilización, de momento, es muy improbable: se perderán dos años más sin aportar soluciones a la agonía del país.

En síntesis, NADA DE NADA, estamos irremisiblemente condenados al desastre nacional.