NOS QUEDA CHAVEZ

 

 Artículo de César Alonso DE LOS RÍOS  en  “ABC” del 23/11/04

 

Por su interés y relevancia, he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web. (L. B.-B.)

 

NO puede ser respetada España en el exterior cuando se está rompiendo en el interior. Si la Nación española es negada por los propios españoles, con el beneplácito del presidente del Gobierno, difícilmente podemos tener autoridad para organizar una comunidad de países como los iberoamericanos, tan celosos por cierto de su identidad. Si algo nuestro resulta especialmente doloroso a los hispanos es nuestra obsesión cainita, el desprecio al pasado español, el ajuste de cuentas con nuestra historia, al fin y al cabo suya también.

Cuando llega Zapatero a Costa Rica con el fardo de los pleitos «territoriales» ya va muy restado. Lleva a cuestas la contestación de fronteras adentro. Sin autoridad. Dando pena. Las zarandajas de la multiculturalidad, el mestizaje y el pluralismo que trufan sus discursos no consiguen tapar la fragilidad real: la condición coyuntural del Estado.

Desde la Patagonia a California se sabe que la lengua española (que es también la suya) es preterida en España en la educación, en la administración, en los medios de comunicación, en la vida comercial, en la publicidad, en los simposios... Hasta en la provocadora pancarta de 30 metros que apareció en el Camp Nou con motivo del Barcelona-Madrid, había que leer en inglés que «Cataluña no se considera España». Última expresión del odio al castellano.

SI una buena parte de la sociedad española (la que vota izquierda y nacionalistas) opina que el Descubrimiento de América fue una empresa castellana, exclusivamente de dominio, inhumana y etnicista de la que nadie debería sentirse heredero sin mala conciencia, ¿cómo va a funcionar una Conferencia Iberoamericana basada sobre todo en los lazos históricos, religiosos, culturales? Es posible que estas contradicciones puedan ser compatibles con tinglados de premio y relaciones públicas en el mundo literario y editorial, pero no en el mundo de la economía y de las relaciones comerciales. Para esto se van al Fórum del Pacífico, con Ricardo Lagos... Gentes como Ricardo Lagos salvarán el patrimonio hispano-americano, no acomplejados como Zapatero. Éste quedará para dar premios a Carlos Fuentes y gentes así...

Qué racha internacional en tan pocos días. Qué camino tan rápido al aislamiento. Nos abandonan en Costa Rica nuestros «hermanos», nos ningunea el Rey de Marruecos, no nos convoca Condoleezza Rice a la primera reunión en la que como responsable de Exteriores querrá tantear las voluntades de todos aquellos países a los que vale la pena oír en relación con la guerra de Oriente Próximo.

DICEN los conocedores de C.R. que, al sustituir a Powell, quizá rebaje algo la dureza de sus posiciones con los aliados y que hasta ahora se concretaban en la siguiente y muy gráfica consigna: «Punish France, ignore Germany and forgive Russia». ¿Y España? ¿Qué respecto a los nuestro? ¿Qué sobre Zapatero y sobre Moratinos? Dicen los que la conocen bien que fue tal la conmoción que le produjo la catástrofe de las Torres Gemelas que puede hablarse de un cambio en su vida. A partir de ahí cabe imaginar lo que puede pensar de un político que como Zapatero se amilanó ante los autores de esa acción, ante Al Qaida y Bin Laden, y se hizo de este amilanamiento una norma de conducta para el pueblo español. Condoleezza Rice no es una marciana y sabe que este comportamiento ante el 11-S y su insolidaridad con el Gobierno español del momento ante la masacre madrileña del 11-M le reportaron nada menos que el triunfo electoral. Nadie ha hecho tanta carrera con tantas pusilanimidades.

Tan sólo nos queda Chavez.