Destacados socios del Ateneo Barcelonés firman contra Rosa Díez
Noticia en
“La Voz de Barcelona.com” del 12 de diciembre de 2008
Destacados
socios del Ateneo Barcelonés, encabezados por Heribert
Barrera, han decidido firmar una carta
conjunta para oficializar su queja contra la actual dirección de la entidad por haber
permitido, el pasado jueves, la celebración de un acto de Rosa
Díez, líder de Unión Progreso y
Democracia.
La carta ha
sido entregada este jueves por Francesc Castany y entre los firmantes se
encuentran, además del ex presidente del Parlamento autonómico, la presidenta
de L’Opinió Catalana, Muriel Casals,
y la bibliotecaria del Ateneo, Imma
Albó.
En la
misiva se tilda a UPyD de ‘partido anticatalanista’ y de ‘formación
reaccionaria’ y se señala: ‘Nos indigna que
los mensajes emitidos cada día desde los medios de comunicación españolistas
con sede en Madrid, encuentren en nuestra entidad un espacio de acogida. Dicho
de otra forma: no nos importa discutir con la COPE, El Mundo, La Razón o el
ABC, pero nos molesta tenerlo que hacer en el Ateneo’.
Los
firmantes entienden ‘inadmisible y contraproducente que sea el Ateneo donde
encuentren calor individuos que reclaman un recorte de la autonomía y niegan
la existencia de la Nación catalana‘.
Y añaden:
‘En el Ateneo Barcelonés nadie debería poder ofender
impunemente la dignidad de los catalanes‘.
Con
un breve comentario al final:
¡PERO
QUÉ NIVELÓN!,
¡DE
CRO-MAGNON!
La carta de estos socios del
Ateneo de Barcelona pone de manifiesto el grado de degeneración de la
democracia y la cultura en Cataluña. El Ateneo debería
ser un centro de debate cultural y político, y no una masía monopolizada por el
nacionalismo más reaccionario. Cataluña está bloqueada y putrefacta debido al
impulso irresistible del nacionalismo hacia el totalitarismo: la libertad se va
debilitando día a día, y los núcleos de creación quedan en manos de
cro-Magnones y abducidos, incapaces de salirse del catecismo nacionalista más
simplón y cerrado.
Cataluña y el conjunto de España
están sufriendo un golpismo paulatino, dirigido a acabar con la libertad y la
democracia y a imponer una concepción monolítica y autoritaria de la sociedad.
La sociedad catalana y española en su conjunto no es consciente de la realidad
de este golpismo sinuoso. O despierta con anticipación o tendrá que despertar
cuando comience el ruido. Posiblemente, por desgracia, suceda esto último: no
existe un nivel de maduración democrática suficiente en el país como para poder
disponer de una ciudadanía consciente. Esto va muy mal.