LAS CUENTAS CLARAS DE ROSA DÍEZ

 

 Artículo de AlfredoCasquero en “El Semanal Digital” del 16.12.07

 

 Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.

 

 Rosa Díez es una mujer valiente, decidida, con las ideas muy claras y un compromiso ético en la defensa de las libertades fuera de toda duda.

 

Se embarcó en un proyecto difícil, como era fundar un partido político en un panorama dominado por el bipartidismo, por el sometimiento de los medios de comunicación y de las entidades financieras a grupos de interés. Se lanzó sin red económica, más allá de las aportaciones particulares. Ahora los bancos, poderoso caballero es don dinero, han cerrado las puertas a su formación política. No por falta de solvencia, pues ella sola se basta para conseguir dos diputados al menos en toda España. Incomprensible y sospechosamente a Rosa no le dan dinero para su proyecto político.

Ella no se arredra y pide colaboración, por
medio de créditos a ciudadanos que consideren sus propuestas como necesarias. Que el Estado reasuma competencias, propuesta estrella, pero no novedosa, porque ya lo lanzó Juan Ramón Calero por medio del finiquitado PADE, es hoy más necesario que nunca. Acudir al consenso constitucional roto por Zapatero y frenar la sangría nacionalista supone decir no de entrada a los apoyos interesados e independentistas de CIU o el PNV. A eso el PP no se atreve, porque una cosa es predicar y otra dar trigo.

Habrá conflicto, interior, para mucha gente. Porque el cuerpo te pide votar a algo nuevo. Votar a alguien valiente, que dice las cosas claras sin temor a lo políticamente correcto. O votar a quien lleva mucho tiempo denunciado determinado estado de cosas. Aunque algunos recuerden, quizá con razón, su etapa en apoyo al PNV, cuando el PSOE perdió la oportunidad histórica de alzarse con el Gobierno vasco, el PNV ha cambiado mucho, o quizá nada, pero ahora juega con las
cartas boca arriba, con la sombra de ETA siempre cubriendo el mismo objetivo.

Si el PP garantizara que no se volverá a entregar con la cabeza gacha a los nacionalismos, y que toda su exagerada oposición de patriotismo coyuntural no se debe sólo a que están en la oposición, seríamos muchos los que, en una situación tan
particular como ésta con un PSOE radicalizado por sus apoyos, votaríamos PP, seguramente sin respirar demasiado. ¿Pero garantiza el PP las reformas necesarias para asegurar la Constitución, cambiar la ley electoral, reformar la Justicia? Hoy por hoy no.

Eso es lo que permite a Rosa Díez ser esperanza de muchos, que sin ser de izquierdas, creen en la España unida y constitucional. Eso es lo que hace tan incomprensible, tan sospechoso, que el dinero escape cuando Rosa y la UPD se acercan. Por eso me parece de justicia al menos denunciar la situación. Las cuentas de Rosa están clarísimas, aparecen en la página web de su partido, y allí caben todos los españoles.