LA GRAN DEPRESIÓN
ESPAÑOLA DE 2009: HECHOS Y CIFRAS
Ampliamente difundido por la Red, ofrecemos a nuestros lectores el
"Informe Centeno", como se conoce al estremecedor documento elaborado
por este conocido Catedrático de Economía de la Universidad Politécnica de
Madrid. Léanlo, pónganse sus cabellos de punta. Pero díganse también —aunque no
sea Roberto Centeno quien lo diga— aquello de que no hay mal que por bien no
venga,. Díganse que quizá sólo así, sólo a través del sufrimiento, puede una
sociedad enferma tomar conciencia de lo grave de su enfermedad. Una sociedad
tan enferma como para haber edificado —movida por la pura codicia especulativa—
2.500.000 viviendas… ¡vacías! Toda una ciudad tan grande como Madrid…, vacía y
que nadie necesita para vivir.
Informe de ROBERTO CENTENO en “El
Manifiesto” del 11 de febrero de 2009
Por su interés y relevancia
he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.
Una depresión es un largo
periodo —diez años o más— caracterizado por un bajo nivel de producción,
consumo e inversión, con quiebras masivas de empresas, un elevado nivel de
paro, un descenso de los precios y destrucción de la riqueza de las familias. Y
para comprender por qué desembocaremos en esta situación por primera vez en
nuestra historia, es necesario entender tres hechos esenciales.
El primero, que desde un punto
de vista estructural, el
crecimiento económico de España ha sido básicamente tercermundista: no nos hemos adaptado en
absoluto a la globalización, y hemos perdido el 15% de cuota de mercado en el
comercio mundial, del 2,06 en 2003 al 1,74 en 2007. Es decir, se ha tratado de
un crecimiento basado en el consumo interno, sostenido por un incremento masivo de la
población —el mayor del mundo desarrollado, consecuencia de la inmigración—, y en el turismo.
Y todo ello fuertemente
apalancado (multiplicado) por el endeudamiento masivo de familias, empresas y
entidades financieras, también el mayor mundial, y un déficit exterior de más de un 11% del PIB —producimos un 11% menos
de lo que consumimos— y
realizado mediante la explotación
masiva de mano de obra barata: casi el 50% de la población ocupada es
mileurista.
Simultáneamente, el punto de
inflexión, no sólo inmobiliario, sino del modelo en su conjunto, ocurrida en
marzo 2007, ha coincidido con la mayor crisis financiera internacional desde la Gran Depresión, y con
el peor Gobierno imaginable, un hatajo de analfabetos funcionales que ha mantenido una inacción
suicida durante más de un año, y como acertadamente se ha resumido en estas
mismas páginas, “ni sabían entonces por qué crecíamos, ni saben ahora por que
nos hundimos”, a lo que se añade una oposición cobarde e incapaz, que no ha tenido el cuajo de
plantar cara al Gobierno, y ni siquiera ha presentado una alternativa creíble
para enfrentarnos a la crisis.
Y el tercer hecho esencial es un
modelo de Estado con un nivel de ineficiencia, despilfarro y corrupción único
en el mundo. Todo
multiplicado por 17, cientos
de miles de funcionarios haciendo lo mismo —sobran unos dos millones—, inventando y controlando 17
normativas diferentes, 17 sistemas informáticos, 17 de todo, y con un mercado
fragmentado en 17 parcelas independientes, un desastre para productividad y la
eficiencia, y al frente del tinglado cientos, miles, de consejeros, directores
generales y toda una patulea de jefes y jefecillos con coche —hay mas coches oficiales
que en Estados Unidos— secretaria
y despacho de lujo, un cortejo de indocumentados nombrados a dedo con carné del
partido, y con el mayor nivel de corrupción de la Historia de España.
Las Comunidades Autónomas
consumen el 60% del gasto público, el triple del neto del Estado, 177.000 millones de
euros, un 78% del cual es gasto no productivo, frente a un resto de 60.000
millones de euros para financiar España. En total, un 18% del PIB, donde la
mitad aproximadamente, el 9%, es gasto innecesario. Ningún país del planeta
podría soportar ésta barbarie.
Y estos son los hechos, ahora
las cifras. Y aquí tropezamos con una situación insólita en una democracia:
unas instituciones del Estado (Banco de España, INE, etc.) al servicio de un
partido, instituciones que mienten y manipulan masivamente tanto sus cifras
como sus previsiones, una irresponsabilidad inaudita que ha llevado a muchas
familias y empresas a adoptar decisiones equivocadas y peligrosas.
Esto obliga a quienquiera desee
saber la verdad a estimar sus propias cifras, que es lo que hacen todas las
grandes empresas con intereses en nuestro país. El PIB, estimado a partir de
las afiliaciones de la Seguridad Social y la productividad, así como valorando
el consumo de gasóleo de automoción, cuya correlación es prácticamente total.
En el último trimestre de 2008, el PIB ha caído en un 2%; las afiliaciones a la
Seguridad Social, en un 2,5%; y la productividad, en un 0,5%.
Es decir, aquí y ahora, la economía está
cayendo al -8% en tasa anual!, y a un ritmo, que extrapolado a fines de 2009, pues no hay razón alguna
para vislumbrar un cambio de tendencia, superará el -10%. Y eso es una
depresión.
Paro. Los datos oficiales de paro
registrado son falsos, igual que la EPA. A la cifra oficial hay que sumarle
muchos más parados que el Gobierno no computa porque sí —y Rajoy sin decir ni
pío. Sólo los parados no computados desde febrero de 2008 por carecer de
“formación suficiente” /”efecto Caldera”) ascienden a 350.000. Y, finalmente,
el paro total, superior al paro registrado por definición, pues no todos los
parados están inscritos, paro que ha venido siendo un 20% superior al paro
registrado.
Por tanto, a día de hoy y
sumando sólo el “efecto Caldera” al paro registrado, el paro total supera los
4 millones, no los 3,
1 millones oficiales. Pero incluso con las cifras oficiales, el ritmo de
incremento de paro es de dos millones/año, elevando a tasa anual la cifra del
último trimestre, por lo que éste superara los seis millones a final de 2009, y
eso es una depresión.
En todo caso Zapatero es ya el
mayor destructor de empleo de Europa: un 13,4 % frente al 7,8 %, la media de la
Unión Europa. Y lo que ya es el colmo es el paro de menores de 25 años: un
16,4% de la Unión Europea frente al 29,4% de España. Y esto con las cifras
falsas del gobierno. Imaginen ustedes con las verdaderas!
Inflación.Los precios se han derrumbado
del 5,3% en julio al 1,5% en diciembre, en parte por el petróleo y las materias
primas, pero la causa más importante es el espectacular hundimiento del consumo:
la inflación que en España siempre es un punto superior a la europea, es ahora
una décima inferior. Esto sitúa los precios al borde de la deflación, algo
infinitamente más grave que la inflación, porque tiene efectos devastadores sobre el empleo, la
inversión y la riqueza. Es la otra cara de la depresión.
Desplome
inmobiliario. Las
viviendas iniciadas están cayendo un 62 % y la tendencia se acentuará, pues el
número de viviendas
nuevas a la venta no es de
800.000 ni de un millón, como falsamente nos cuentan el gobierno y los
interesados, sino de 2,5
millones: 1,2
millones de promotoras y 1,3 millones adicionales de particulares que las compraron como
inversión, y a esto
hay que añadir la vivienda
usada.
Ello significa que hay viviendas
para diez años, y que su precio deberá caer en los próximos meses/años un 30 o
40% adicional para restaurar el equilibrio. Y esto es también una depresión.
Déficit
de las Administraciones Públicas. La respuesta de Zapatero ha sido la típicamente
socialista: una fuerte expansión del gasto y un incremento brutal de la presión
fiscal, particularmente en Comunidades Autónomas y Ayuntamientos, sobre la
clase media y los trabajadores, lo que anula cualquier estímulo.
Consecuencia de ello y de la
caída vertical de la recaudación será un déficit de la Administraciones
Públicas, excluida la Seguridad Social, del 6 % en 2008 y del 12% en 2009, con
una tendencia clara a empeorar en 2010. Y aunque es cierto que nuestro nivel de
deuda pública es inferior a la media europea, esto va a cambiar radicalmente
por la disparatada política de gasto y avales al sistema financiero, tanto que
el coste de nuestras emisiones está ya 100 puntos básicos por encima del de
Alemania. Todo ello nos deja sin margen de maniobra frente a contingencias futuras.
Este nivel de déficits corresponde a una depresión.
Seguridad
Social y sistema de pensiones. Esto requiere un análisis
aparte, pero en forma resumida y según las estimaciones actuariales más
recientes, estarán quebrados en 2014. Y la solución según Solbes y Fdez
Ordoñez: pagar más y cobrar menos, un 30 % menos para empezar a hablar. Éste será el gran legado
de Zapatero a los jubilados.
Sistema
financiero. Ésta es
hoy la parte más preocupante de la situación, porque la crisis crediticia es el
problema más grave que afecta a nuestro sistema económico a día de hoy.
Literalmente esta destruyendo el tejido productivo del país: entre octubre y
diciembre se produjeron mas suspensiones de pagos que en todo 2007. El primer
gran problema del sistema financiero “más sólido del mundo” es que el valor de los activos
no refleja su valor real, pues al contrario que en Estados Unidos, donde cada
trimestre los bancos tienen que valorarlos a precio de mercado, lo que ha
provocado el hundimiento de muchos de ellos, aquí el Banco (del Partido
Socialista ) de España,en un alarde de irresponsabilidad y sectarismo suicida,
acepta unos balances
de ficción y permite repartir dividendos hasta a la Caja mas cutre, aunque más de la mitad del
sistema esta técnicamente quebrado.
El segundo problema es el enorme endeudamiento
exterior: más de
900.000 millones de euros, la cifra más elevada del planeta. Encima,para evitar la quiebra,estos irresponsables que
nos gobiernan han puesto 200.000 millones de euros a disposición de éstos
insensatos, y además ¡sin la menor obligación de fijar un calendario de repago
de la deuda, con lo cual el apalancamiento se mantiene íntegramente!
Pero ¿a qué narices está jugando
el señor Fernández Ordóñez? Ambos hechos llevan a una crisis crediticia brutal.
Los 200.000 millones de avales tendrían que haber servido para avalar créditos
a familias y empresas, y en lugar de ello se destinan íntegramente a tapar los
agujeros del sistema financiero, algo económica y socialmente criminal, pues
todas las crisis crediticias sin excepción han terminado en una depresión.
En definitiva, todos estos
hechos y cifras, apuntan a que España registrarásu primera deflación en los
próximos 12/18 meses,a menos que se adopten urgentemente las dos
medidas
siguientes.
La
primera, dar
marcha atrás a la barbarie de Estado Autonómico, y que los fondos así liberados sean empleados en
reducir la presión fiscal, con objeto de restablecer el poder de compra de familias
y empresas. Es
decir, justo lo contrario de lo que está haciendo Zapatero, montando una
mascarada infame, con todos los presidentes autonómicos poniendo el cazo, para
recibir un dinero que España ni tiene ni tendrá. Una locura inenarrable y que,
al igual que el destino de los 200.000 millones de avales, puede calificarse de
social y económicamente criminal.
Zapatero va a endeudar a los
españoles y a sus hijos para que el cáncer autonómico siga originando sus
despilfarros, justo cuando el desempleo crece a un ritmo de 2 millones al año,
la Seguridad Social está quebrada y no hay dinero ya ni para las pensiones ni
para los parados. Realmente Zapatero y sus secuaces han enloquecido.
La
segunda cuestión es la crisis crediticia. O los 200.000 millones se destinan a avalar préstamos a
familias y PYMES, o la
destrucción del consumo y la capacidad productiva del país están aseguradas. La
totalidad de los parches económicos del gobierno, y de las propuestas del
PP, son absolutamente inútiles, si previamente no se adoptan éstas dos medidas.
Como el gobierno no va hacerlo,
sino que va a hacer todo lo contrario, y la oposición tampoco, no hay mecanismo
económico ni fuerza humana, que eviten la depresión.Con los hechos y las cifras
en la mano, es imposible llegar a otra conclusión. Una depresión que hará historia, pues
reducirá drásticamente la renta disponible de las familias, hundirá nuestro
país en el ranking económico mundial y hará casi imposible el mantenimiento de
España como nación.