Chaves tacha de absurda la idea de Maragall para solucionar el déficit fiscal

 

 

El presidente andaluz defiende que la financiación debe debatirse entre todas las comunidades

 

Noticia, por LOURDES LUCIO  -  Sevilla -,  en “El País” del 08/04/2005 

 

Por su interés y relevancia, he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web. (L. B.-B.)

 

El presidente de la Junta de Andalucía y del PSOE, Manuel Chaves, se opone a que se puedan fijar topes máximos a la solidaridad, como propone el Gobierno tripartito catalán, y considera un "absurdo" abordar el sistema de la financiación autonómica partiendo de la base de las balanzas fiscales de cada comunidad, ya que en su opinión eso daría origen a "17 proyectos fiscales y de financiación". Dicho esto, el líder socialista aboga por un acuerdo común en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) de manera que las "reglas del juego se pacten entre todos".

Las diversas propuestas de financiación del Gobierno tripartito catalán que preside el socialista Pasqual Maragall no gustan al presidente federal del PSOE, quien, no obstante, coincide con éste en que el ámbito de discusión sea el Consejo de Política Fiscal y Financiera, donde están representadas las comunidades del régimen común; es decir, todas, excepto Navarra y el País Vasco. "Ése es el camino por el que hay que avanzar. Yo reconozco que Cataluña tiene intereses legítimos que hay que abordar para facilitar el encaje de Cataluña en España, y verlo en un contexto en el que participen entre todas", afirmó ayer a este diario.

Desde una posición conciliadora, Manuel Chaves considera "una manera absurda de plantear" el problema el hablar de la existencia de "territorios acostumbrados al subsidio" y otros "irritados por el uso que se hace de su sobreesfuerzo fiscal", como dijo el miércoles Pasqual Maragall.

El presidente andaluz defiende que no sólo Cataluña aporta solidaridad, sino también Madrid, Baleares y La Rioja, "por lo que se podría llegar al absurdo de que hay 17 proyectos fiscales y de financiación". En cualquier caso, el presidente de la Junta de Andalucía cree que Pasqual Maragall no se refirió específicamente a Andalucía cuando aludió en su declaración a las subvenciones. "No existen las comunidades subsidiadas, sino comunidades que reciben dinero y recursos para carreteras e infraestructuras", precisó el presidente del PSOE.

También discrepa del criterio de Maragall de que cada comunidad ofrezca unos servicios públicos similares al esfuerzo fiscal que realiza. "Cuando Maragall afirma eso hay que recordar que los impuestos no los pagan los territorios sino los ciudadanos", dice Chaves, que se opone rotundamente a que en las reformas de los Estatutos de Autonomía se pueda fijar unilateralmente un sistema de financiación, "porque afecta a la capacidad financiera del Estado y al resto de las comunidades".

Asimismo, discrepa de que exista una deuda histórica con las comunidades en materia de sanidad. "Lo que hay es un déficit, no una deuda histórica, bien porque los servicios se calcularon mal o porque la demanda ha sido muy fuerte", explicó.

Manuel Chaves insiste en su posición de que en la futura modificación acotada de la Constitución las comunidades autónomas tengan diferentes denominaciones, como reclama el presidente catalán para el caso de las que plebiscitaron su Estatuto en la República. "Es un debate esencialista que no conduce a nada, sino a agravios y discriminaciones. Lo que no fue hace 25 años, no puede ser ahora", opina el presidente de la Junta de Andalucía.

Propuesta de reprobación

 

Pasqual Maragall (PSC) es uno de los políticos más citados en el Parlamento andaluz por los representantes de la oposición, especialmente, del Partido Popular (PP). Esto no es un hecho nuevo en Andalucía. Antes lo fue su antecesor, Jordi Pujol (CiU), y en ambos casos provocados por recelos ante las propuestas de financiación autonómica que llegan desde Cataluña.

Los socialistas andaluces no se dieron ayer por aludidos ante la afirmación de Maragall de que hay que territorios acostumbrados al subsidio. Pero el presidente regional del PP, Javier Arenas, la interpretó como una ofensa. "Que no ofenda a Andalucía", dijo este dirigente popular, que consideró un "profundo error que pueda hacer comentarios sobre nuestra situación económica y la creación de empleo" en la comunidad.

Arenas, que no tiene escaño en el Parlamento andaluz, aseguró que su grupo parlamentario presentará una iniciativa para "reprobar" a Maragall, por unas declaraciones que, dice, "se pueden considerar como un insulto para Andalucía".

Esta fórmula de reprobación no existe jurídicamente, pero en la legislatura pasada se utilizó por primera vez, a instancias del PSOE, para cuestionar al entonces ministro de Justicia, José María Michavila (PP). También, en ese caso, "por ofender a Andalucía".