LA HORA DE LA VERDAD DE UPyD
Artículo
de Erasmo de Salinas en
“Ciudadanos en la Red” del 05 de octubre de 2008
Por su interés y
relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio
web.
La
diputada de UPyD en el Congreso, Rosa Díez, ha dicho hoy que en una situación de
crisis política, económica y social como la que vive España, las cosas no se
resuelven dando buenas noticias, sino “diciendo la verdad”, asumiéndola y
diciéndosela a los ciudadanos. Grandes aplausos en el Circo Price.
En situación de crisis, y también en situación normal, querida Rosa Díez, que
los ciudadanos no somos infantes y queremos saber la verdad sobre lo que ocurre
en la política, lo ocurrido con el GAL, lo ocurrido con la negociación con ETA,
lo ocurrido el 11-M. Se nos van quedando las cosas en el armario y luego nos
rebrotan con demasiada violencia.
Hace unos días, Joan Valls, invocaba
a José María Aznar, para que nos contara la verdad y se dejara de pruritos,
lo mismo podía hacer María San Gil, y también Rosa Díez, que fue del PSOE
durante 30 años, ocupando cargos institucionales diversos en representación de
este partido. ¿Cuál es la verdad?.
Todo esto me recuerda a aquel cacique de pueblo que ante una manifestación
contra sus excesos opresores, tomó la palabra y dijo: “es hora de que todos
pidamos justicia y libertad. Cuenten conmigo para lo que sea necesario”.
Nos habla Rosa Díez de regeneración democrática ante tanta degeneración
democrática. Está bien el discurso, creo que electoralmente será el más
rentable, ante el caos reinante sólo hay que tirar hasta las próximas
elecciones poniendo a caldo a todo el mundo, a Zapatero y a Rajoy, por
supuesto.
Pero en realidad, no todo el mundo está satisfecho con los logros de UPyD, un
partido político que no admite la crítica en su seno poco tiene que ver con la
libertad, la igualdad y la democracia, un "partido pancarta" está
bien como denuncia, pero es insuficiente para salir del marasmo en el que se
encuentra este país, sus ciudadanos y su historia.
UPyD sólo puede ser LA ALTERNATIVA POLITICA A TODO LO QUE HAY, y lamentablemente no
lo es. Un partido que sólo nos muestra sus aciertos, es una representación lunática
de la realidad, con una cara visible para todos y otra oculta para todos. Un
partido con un discurso triunfalista y reparador, no es un partido que quiere
decirle la verdad al ciudadano, es un nuevo actor del espectáculo político que
nos obligan a vivir. La verdad no es útil, porque si es útil -para conseguir
confianza o votos-, más que verdad, es propaganda.
Por críticas menores como éstas, a algún militante de UPyD le ha costado un
expediente de expulsión. La comunicación interna dentro del partido está
artefactada y prácticamente prohíbida, quedándose en las alabanzas y elogios de
los blogs de la web oficial, la única participación de los militantes.
Estamos apañados si esto es todo lo que puede ofrecer UPyD, ejemplo de partido
acaparador construido no para cambiar las cosas, sino para alcanzar cuota de
participación política. Organización extravagantemente jerarquizada, demasiado
heredera del PSOE, y cerrada a cualquier alternativa de comunicación en
libertad.
A pesar de todo, estoy de acuerdo con Rosa Díez, ¡que resplandezca la verdad!,
pero toda la verdad, no la que interesa mostrar a los ciudadanos para conseguir
votos, porque eso es secuestrar nuestra dignidad, una vez más, como hacen todos
los demás partidos políticos, es un engaño.
UPyD puede ser un partido de ciudadanos activos políticamente hablando, que en
democracia sean capaces de vencer la opresión de la política, o puede no ser
nada. Hasta ahora, Rosa pone la voz que se quiere escuchar, un canto de sirena
en este océano de incertidumbres, pero no es suficiente, ni mucho menos.
En UPyD tienen que decidirse de una vez si quieren ser un dique de protección
del sistema político corrupto realmente existente al servicio del PSOE y el PP,
o el ariete al servicio de los ciudadanos para destruirlo. Sin más dilación,
por cierto, porque no queda mucho tiempo para que la vorágine ciudadana arrase
con todo, en sentido simbólico lo digo, por supuesto.
Vamos a dejarnos ya de acrobacias dialécticas y funambulismos circenses, es la
hora de la verdad, aunque duela. La verdad de los parados, la verdad de los
enriquecimientos ilegítimos, la verdad sobre las estafas y mentiras continuadas
a los ciudadanos. La verdad es que no hay democracia en este país, que no se
respeta la Constitución, y que la política es exclusivamente un negocio con los
fondos del Estado, a costa de los ciudadanos.
Los ciudadanos estamos dispuestos para escucharla y obrar en consecuencia,
¿será capaz alguien desde la política de tirar de la manta o sólo nos dirán que
sería necesario hacerlo?. O alternativa real, o más de lo mismo. O al lado de
los ciudadanos, o al lado de los políticos, esa es la unica cuestión
relevante..., esa es la verdad.