DECLARACIONES DE OTEGI: «EL PROCESO NO TIENE RECORRIDO PORQUE PNV Y PSOE HAN DEJADO LA MESA»

 

 

 Informe de Gari MUJIKA en “Gara” del 02.06.07

 

 Por su interés y relevancia he seleccionado el  Informe que sigue para incluirlo en este sitio web.

 

 

Colapso del proceso de diálogo político

 

 

Si hace varias semanas la izquierda abertzale anunciaba que el proceso de diálogo se encontraba interrumpido, Arnaldo Otegi confirmó ayer que el estado actual es de colapso. La Comisión Negociadora de la Izquierda Abertzale explicó que tanto el PSOE como el PNV han abandonado la mesa de diálogo político y han dado un «no rotundo» a que las ciudadanas y ciudadanos vascos puedan decidir libre y democráticamente su futuro.

 

 

 

La izquierda abertzale es el único interlocutor del proceso de diálogo político que continúa «sentado» en la mesa de conversaciones, porque el PSOE y el PNV «se han plantado» y se han levantado de la mesa. Arnaldo Otegi señaló ayer que esa actuación ha generado que a día de hoy el proceso de diálogo y negociación «no tenga recorrido» y haya pasado de una fase de interrupción al colapso, propiciando así un escenario, el actual, «de máxima gravedad».

La Comisión Negociadora de la Izquierda Abertzale compareció ayer en Donostia para dar cuenta del estado en el que se encuentra el proceso político en Euskal Herria, y haciendo gala de la transparencia a la que hacen siempre referencia, Otegi no ocultó la gravedad del estadio político actual, máxime teniendo en cuenta los elementos y entresijos que propiciaron el arranque del proceso, sobre los que también se pronunció.

 

«Compartían» la raíz política

 

Periódicamente, la izquierda abertzale ha venido dando cuenta de los avances o retrocesos que ha vivido el proceso político tras la declaración del alto el fuego de ETA el 22 de marzo de 2006, pero ayer realizaron un balance general, nada halagüeño cara al futuro, en vista de la nula predisposición que, según denunciaron, han mostrado tanto el PSOE como el PNV en todo este periodo.

El dirigente de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi inició la rueda de prensa afirmando que «es evidente que en este país se ha construido una oportunidad para resolver el conflicto político». Una posibilidad «histórica» que, subrayó, sigue existiendo.

Recalcó que esta oportunidad se tejió gracias al diálogo no oficial que la izquierda abertzale mantuvo durante años con el PSOE. Pero más que por las conversaciones, la opción ha existido porque la izquierda abertzale y el PSOE «compartían» que se trataba de un conflicto de índole político, que se resolvería con una solución también de dimensiones políticas. A resumidas cuentas, tal y como concluyó Otegi, «este proceso nacía para dar una solución democrática a la vertebración territorial y al derecho de autodeterminación», los dos nudos gordianos que retroalimentan el conflicto.

El punto de inflexión que, «por lógica y consecuentemente debía dar paso a un diálogo honesto», fue la declaración del alto el fuego permanente decretado por la organización armada ETA. Pero «desgraciadamente», lejos de dar ese paso, Otegi denunció que fue el inicio de una estrategia urdida entre el PSOE y el PNV con dos objetivos: por un lado, «desnaturalizar el proceso y transmitir a la ciudadanía que esto era un proceso técnico»; y, por otro, intensificar el acoso judicial y policial contra la izquierda abertzale para impedir la existencia de igualdad de condiciones entre los interlocutores del proceso de conversaciones, y, a su vez, intentar así erosionar la posición política de la izquierda abertzale.

 

El bloqueo llegó a los dos meses

 

Arnaldo Otegi también planteó varios extremos desconocidos hasta hoy sobre los entresijos del proceso de diálogo.

El político de Elgoibar informó de que «a los dos meses de que ETA declarara el alto el fuego el proceso ya estaba bloqueado». Añadió que por discreción y honestidad no lo hicieron público entonces, pero al visionar todo el trayecto recorrido hasta la fecha mostraron esa circunstancia como un elemento más para comprender el compendio de incumplimientos que achacan al PSOE y al PNV.

En ese contexto, y para desbloquear el estado de las cosas, la izquierda abertzale emprendió una primera iniciativa política para que todas las formaciones realizaran un «esfuerzo» para «estabilizar» el proceso. Mientras que en ese intento se alcanzaron, según Otegi, unos avances y unos compromisos, inmediatamente después la represión y el esquema «técnico» sobre el proceso fue reforzado por el PSOE y el PNV.

La segunda iniciativa para desatascar el proceso llegaría en otoño. Fruto de diversas reuniones y conversaciones se consiguió, tal y como señaló el mahaikide de Batasuna, otro ligero avance y adquisición de compromisos, que una vez más caerían en saco roto al no ser cumplimentados por la formación jeltzale y por el partido que dirige José Luis Rodríguez Zapatero.

 

«No rotundo» de PSOE y PNV

 

Una tercera intentona llegaría con la presentación de la propuesta para la transición democrática plasmada en el pabellón Anaitasuna de Iruñea.

Con anterioridad, y en privado, la izquierda abertzale lo llevó a la mesa de diálogo, para así conseguir acordar el estadio final del proceso político, como otro método para que definitivamente arrancara el proceso. Pero tal y como aseguró Arnaldo Otegi ayer, primero en privado, luego en público, y ahora de manera oficial, tanto el PNV como el PSOE han rechazado la propuesta de la izquierda abertzale, «sin presentar ninguna alternativa ante el rechazo».

Es en este contexto en el que el mahaikide anunció que «el proceso de diálogo político no tiene recorrido en estos momentos en este país» porque la izquierda abertzale «no tiene con quien dialogar». Y no hay camino a recorrer, según Otegi, por una sencilla razón: porque el PNV y el PSOE «se han plantado y en la mesa de diálogo sólo está la izquierda abertzale».

«Los principales interlocutores se han levantado de la mesa, le han dado un portazo y le han dicho a la izquierda abertzale que los vascos de los cuatro territorios no tienen derecho a construir un espacio común institucional si así lo deciden y tampoco a decidir libre y democráticamente su futuro», añadió Otegi para, a renglón seguido, reiterar que «el acuerdo político y la paz son posibles en Euskal Herria» si existe una verdadera voluntad política para ello.

 

Compromisos intactos

 

No obstante, el dirigente independentista insistió en que la izquierda abertzale mantiene intactos sus compromisos en pro de un proceso que resuelva el contencioso en términos políticos, y anunció que «redoblarán esfuerzos» en esa dirección tanto en Euskal Herria como en los estados español y francés y en el ámbito internacional.

«Ése es nuestro compromiso, y esperamos que se abra la puerta a una reflexión sosegada por todas las partes y quienes han dicho que no a este proceso sean capaces de estar a la altura de las circunstancias y, con ambición histórica, sentarse en una mesa a poner las bases que permitan la solución definitiva del conflicto», concluyó, apostando por el diálogo y la negociación como métodos ineludibles.