LO QUE VALE LAVERDAD
Artículo de Juan Carlos Girauta en “Libertad Digital” del 29.01.08
Por su interés y relevancia he
seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.
El formateado es mío (L. B.-B.)
Con un breve comentario al final:
LO QUE NOS JUGAMOS
Luis Bouza-Brey, 29-1-08, 21:00 hs.
Ningún país decente dejaría de exigir
responsabilidades a un presidente que miente de forma tan flagrante como mintió
el nuestro tras los atentados de la T-4. Sorprende que reconociera aquella
falsedad atañendo a un asunto que había sacado a millones de personas a la
calle y que había concentrado durante años las más severas críticas de la
oposición y de los medios no estabulados. Quizá tenía motivos para pensar que
las actas se harían públicas de todos modos, o simplemente tuvo un ramalazo de
sinceridad inducido por Pedro J. Ramírez. Nunca lo sabremos.
Más allá de las razones de su
autoinculpación, el hecho es que existió. Amparándose en presiones de
fantasmagóricas instancias internacionales, se puso a los pies de los caballos.
Y con él a su partido y a su Gobierno, empezando por el ministro Rubalcaba, que
había negado con particular contundencia el mantenimiento de contactos de cuya
existencia conocía. Se trata del mismo Rubalcaba que durante la jornada de
reflexión de las pasadas elecciones había atizado la crispación social
–mientras se acorralaba a los populares en decenas de sedes– acusando al
ejecutivo Aznar de… mentir.
El líder socialista se cree por encima del
bien y del mal. Acostumbrado a transgredir las leyes sin consecuencias –desde
la ley de partidos hasta la Constitución entera con su Estatut
(pues suyo fue)–; progresivamente convencido de poseer
extraordinarios poderes –poder para reinventar la historia, poder para llevar
su ideología a la escuela–, este Adán persuadido de ostentar capacidades tales
como acometer una alianza de civilizaciones –nada menos– concluyó que también
podía decir una cosa y su contraria.
Ahora trata de explicar lo inexplicable
aduciendo riesgos para los negociadores. Sería pues la seguridad de sus
enviados la que hizo afirmar al ministro del Interior que el proceso estaba
“finiquitado, liquidado y acabado” mientras continuaba en marcha, siendo los únicos finiquitados y liquidados Carlos Alonso Palate y Diego Armando Estacio.
Naturalmente nadie cree ya en la palabra de
Rodríguez. Ni los suyos pueden hacerlo, aunque el PSOE ha dejado de considerar
la verdad un valor apreciable. Con dos versiones irreconciliables de lo mismo,
cuanto más repita el presidente que no nos engañó, más se hundirá en el fango. Queda
por ver si aquí es posible mentir de forma tan obscena sin pagarlo en las
urnas. El 9 de marzo no sólo se examina al Gobierno; España se examina a sí
misma sobre el valor que le da a la verdad.
Juan Carlos Girauta
es uno de los autores del blog Heterodoxias.net.
Breve comentario final:
LO QUE NOS JUGAMOS
Luis Bouza-Brey, 29-1-08, 21:00 hs.
Uno lo viene diciendo hace años: nos
estamos jugando la libertad, nos estamos jugando la democracia, con estos
gobernantes. La mentira permanente y los intentos populistas de compra de voto
ponen de manifiesto el tipo de liderazgo que soportamos. Y se lo dice un socialista
de toda la vida, que observa como se van destrozando
los ideales de igualdad, libertad, democracia y federalismo por los que han
luchado y sufrido tantas personas honestas dispuestas a sacrificar su tiempo y
energías por el desarrollo de España.
Estos dirigentes han traicionado
todo lo fundamental (valores, ideales, Derecho, Constitución, integridad y
dignidad del pueblo) por alcanzar el poder y mantenerse en él. Y uno no es un
´´ facha´´ sino un socialista democrático y liberal que percibe perfectamente
la estafa e imbecilidad inducida promovidos por los actuales gobernantes.
La demagogia populista está vaciando
de sustancia auténtica la democracia que tanto nos costó alcanzar: se está
destruyendo la salud pública del país, impidiendo la alternancia mediante la idiotización de la mitad de la población. Eso es lo que nos
jugamos, como dice Girauta: si España valora la
verdad en el espacio público; si España valora la "´´ Respublica´´ ; si España aprecia la democracia, o si sólo da de sí para
una ´´ República bananera´´.
La cosa es muy seria: si se tratara
de una cuestión ideológica, uno estaría más cerca de la izquierda que de la
derecha. Pero aquí lo que nos estamos jugando es la supervivencia de la
democracia, si seguimos permitiendo gobernar a esta pseudoizquierda
que hace políticas contrarias a la libertad y a la igualdad. La democracia, que
es un sistema que funciona en base a la información, no puedo funcionar en base
a la mentira: ¿son conscientes de ello los medios de comunicación ´´ progres´´?
,¿ los intelectuales ´´ progres´´?, ¿los socialistas
auténticos que puedan quedar en el PSOE o entre sus votantes? ¿ los electores de centro, que tienen miedo al PP pero no a la
demagogia, el populismo y la inepcia de los gobernantes?
¡Despierten de una vez! ¡Estén a la
altura de las circunstancias, que es mucho LO QUE NOS JUGAMOS!