ADANISMO Y PAIDOFILIA

Artículo de Carlos Martínez Gorriarán en su blog de “¡Basta Ya!” del 07 de julio de 2008

Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.

Con un muy breve comentario al final:

LES LLAMARIAN FACHAS

Luis Bouza-Brey, (7-7-08, 8:00)

La nueva secretaria de organización del PSOE confirma el éxito de lo que bien podemos llamar “modelo Bibiana” en ese partido. En efecto, como la flamante ministro de Igualdad, la poderosa aparatchik es otro ejemplo paradigmático de joven persona humana con una carrera política –y sólo política-, si no meteórica, espléndidamente encarrilada. Afiliada a los 15 años, diputada a los 23, secretaria de organización a los 31. Por lo visto, nunca ha dado un palo al agua fuera del partido, ni se le conocen otras habilidades profesionales que la eficacia en el ascenso por la cucaña. Un perfil perfecto, intachable, desde el punto de vista zapateril. Muy parecido, por otra parte, al del propio presidente.

La paidofilia zapaterista –amor a lo juvenil- es un trasunto bastante lógico de su adanismo constitutivo. Si uno piensa que el mundo acaban de hacerlo para él y que apenas hay nada con más de treinta años de antigüedad que merezca la pena conocer con cierta profundidad, si se aferra a la creencia adolescente de que las cosas dependen de la voluntad y el deseo y no de la realidad, resulta bastante lógico considerar que los mejores gobernantes para un mundo así sean, precisamente, aquellos liberados del inconveniente de una larga experiencia o de un buen conjunto de las mismas. Cuanto más jóvenes y más inexpertas, mejor. Y si encima son chicas guapas, como la Pajín, requetemejor. Es el paradigma de la “pizarra en blanco”, que supone que las mentes humanas vienen a este mundo sin prejuicio ni predisposición alguna, tan criticado ahora por las ciencias cognitivas pero tan querido por el zapaterismo. Traducido a criterios de selección de recursos humanos, viene a proponer que el mejor candidato a ocupar un puesto es el que menos sepa del asunto: ya aprenderá.

Desde un punto de vista orgánico y de preservación del poder interno, la elección de Leire Pajín presenta otra ventaja nada despreciable que apreciarán quienes tengan alguna experiencia en estos oscuros asuntos, a saber: que precisamente para desprenderse de esa imagen de “niña mona” sin otro oficio ni beneficio que el treping virtuoso, la señora Pajín deberá ser una secretaria de organización inflexible, férrea, desalmada, capaz de estrangular a un lactante sin perder la sonrisa ni elevar la voz: el ideal que busca todo partido con tanto qué perder como el de los socialistas.

Creo que el zapaterismo es el estadio senil de la socialdemocracia española, y me ratifica en esa idea el fenómeno -sólo en apariencia divergente- de que la promoción paidocrática de los jóvenes y jóvenas criaturas de partido venga acompañada de brutales retrocesos en el orden de los principios. Es la coméstica apresurándose por maquillar los estragos del tiempo. Porque la promoción de Leire Pajín y muchos otros ignotos socialistas a la Ejecutiva del PSOE llega a la vez que este partido decide que nada hay más de izquierdas que apoyar la discriminación lingüística y la exclusión de la lengua común en las comunidades bilingües. ¡Todo es poco para arrinconar la igualdad y la libertad! ¡Todo el poder, a la banca! ¡Viva el analfabetismo funcional! ¡Viva el campanario de mi aldea! ¿Qué pensarían de todo esto los viejos socialistas, comunistas y anarquistas, fundadores de la izquierda tradicional, que daban clases de esperanto en sus modestas sedes y casas del pueblo, convencidos como estaban de que la igualdad iba de la mano de una cultura y una comunicación lo más universales posibles, y de que una lengua universal sería un beneficio maravilloso? Bueno, ellos eran viejos izquierdistas con idearios jóvenes, exactamente al revés que estos de ahora: jóvenes gestores de un izquierdismo decadente y retórico armados de ideas vetustas, caducas o inexistentes.

Con un muy breve comentario al final:

LES LLAMARIAN FACHAS

Luis Bouza-Brey, (7-7-08, 8:00)

Idea sugerente, la de Gorriarán, de considerar la paidofilia como cosmética de la senilidad.

El artículo acaba preguntándose qué pensarían los viejos fundadores de la izquierda tradicional acerca de los jóvenes gestores del izquierdismo decadente. Me imagino que los tratarían de enemigos de clase y traidores, y se producirían persecuciones a tiros, purgas de órdago y expulsiones fulminantes, en el interior de los grupos y partidos anarquistas, leninistas y socialrevolucionarios. Y según el momento en que se produjeran los conflictos, los bobalicones sobrevivientes acabarían como refugiados en México, o si fuera en los años treinta, ingresando en el fascio o en la Falange; u hoy, llamándole “fachas” a la auténtica izquierda.

Y si los bobalicones ganaran la batalla, como hoy, se inventarían políticas innovadoras, como incrementar el aborto, o la eutanasia, o la homosexualidad masculina, o el lesbianismo, o el consumo de droga, o el caciquismo reaccionario, o el populismo tecermundista y bananero. Los problemas concernientes a la mayoría, como el paro, la inflación, los contratos basura, la vivienda, la educación, la asistencia médica  o el progreso general del país, se los dejarían  a la oposición “de extrema derecha”.

¡Qué cosas tiene la Historia! ¡O quizá sería más preciso decir  la Historia de España!