ADMIRABLE ROSA DIEZ

Carta al Director en "ABC" del 30-10-06, por Ramón G. de la Infanta. Madrid
 
Admiración es lo que produce la eurodiputada socialista al leer sus escritos y ver sus hechos. Perplejidad es lo que produce la carta que le ha dirigido Juan Carlos Rodríguez Ibarra. El señor Rodríguez Ibarra ha expresado con claridad en muchas ocasiones su idea de España, que muchos compartimos, pero nos ha extrañado un poco que en las ejecutivas socialistas en las que él ha participado se hayan aprobado, creo que por unanimidad, las propuestas del presidente de su partido en sentido contrario, esto es, de disgregación de España. Por eso sorprende que ahora le pida coherencia a Rosa Díez, ella que en pos de esa coherencia se juega la vida en el escenario político más absurdo que hay en España. Y quizá no entienda el señor Rodríguez Ibarra que Rosa Díez está en el mismo sitio desde hace tiempo, que es fiel a sus principios y sus ideas, y que es el PSOE vasco, antaño constitucionalista, el que ha dado un viraje de 180 grados y el que se ha separado de esas ideas.
Rosa Díez, nuestra «querida Rosa» para muchos españoles, se merece apoyo, respeto y admiración, igual que otros vascos que se juegan la vida por defender sus ideas.