Y SIN NECESIDAD

 Artículo de Federico Jiménez Losantos en  “El Mundo” del 13/01/2005

Por su interés y relevancia, he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web. (L. B.-B.)

Muchos aspectos irritantes, por no decir indignantes, tiene la cobertura política que está dando el Gobierno al plan de ETA y el PNV para romper la nación española y su constitución política, pero el que más repugna a la inteligencia es que lo hace sin necesidad.

Que España tiene un problema nacional muy grave desde hace un siglo es tristemente cierto, pero que ese problema no lo susciten, actualicen y radicalicen los separatistas, como es normal, sino el Gobierno de España que debería hacerle frente resulta absolutamente desolador.

Que el delincuente burle la ley es normal. Que lo haga la policía alarma mucho más, y con muchísima razón, a los ciudadanos sensatos. ¿Qué necesidad tenía el PSOE de recibir a Atutxa bajo palio en las Cortes, cuando su obligación era perseguirlo judicialmente por negarse a cumplir la sentencia del Supremo que ordena disolver cierta facción de ETA atrincherada en el Parlamento vasco?

Necesidad, lo que se dice necesidad, ninguna. Conveniencia, a mi juicio, tampoco, pero lo que más espanta es lo frívolo, superfluo, cainita y estúpido de este siniestro numerito. Yo no sé si el espectáculo de sumisión ante el plan votado por los etarras mediante carta de Ternera leída por Otegi puede darle réditos electorales al PSOE en las elecciones vascas.

Es posible, porque en un régimen de terror como el que allí padecen los que no son nacionalistas es fácil vender la falsa mercancía de una paz que el plan Ibarretxe hace más difícil que nunca. De ilusión también se vive y el PSOE es perito en vender humo. Pero ¿qué va a quedar de Zapatero como líder presuntamente español si antes de combatir ya se ha rendido gráfica, plástica, teatralmente ante los enemigos de España?

Pues lo mismo que del plan Ibarretxe: bochorno hoy y violencia mañana, humillación hoy e inestabilidad permanente. Detrás del Eusko Rico, rico no hay siquiera una paz deshonrosa sino un futuro negro, negro para Alava y Navarra, que se niegan al separatismo y a la anexión a ese Estado en régimen de apartheid.

Lo mismo que de la proclamación de la soberanía catalana, paralela e inseparable del plan Ibarretxe, se derivará indefectiblemente un futuro luctuoso no sólo para los catalanes que se sienten españoles y que la clase política convierte en extranjeros en su propio país sino para las Baleares y la Comunidad Valenciana, que son las navarras del pancatalanismo.

No basta deshonrarse para comprar la paz.El que paga el chantaje una vez, se abona a pagarlo siempre.Y es cierto que, a veces, no hay más remedio que ceder ante el crimen y, al menos por un tiempo, dar satisfacción a los malos.Pero ponerse voluntariamente en manos del asesino es algo que hasta ahora parecía reservado a la típica rubia tonta en la clásica película mala de terror. Que es lo que empieza a parecer esta España boba de ZP.