EL TIMO DEL 13-M

 

 Artículo de Federico Jimenez Losantos en “El Mundo” del 13.03.06

 

 Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.

 

Se puede poner como se ponga la vicepresidenta 'Akuna Patata'; puede dictar Alvaro Cuesta, ese buen conocedor de los predios de Manolón el de Avilés, la democrática doctrina de que el PP no debe volver nunca al poder; puede, en fin, encanarse editorialmente Polanco y puede bailarle el agua su cipayo 'Carcalejos', pero lo cierto es que dos años después del 11-M lo único que está claro es que el actual Gobierno lo ha enturbiado todo, antes y después de llegar a La Moncloa; que ha mentido de forma sistemática al juez y a todos los españoles; que ha ocultado pruebas y ha sembrado de pruebas falsas la instrucción sumarial; que ha tratado con bastante éxito de extraviar al juez Del Olmo y, con menos fortuna, de engañar a la opinión pública.

Pero al final lo único que parece indiscutible, o casi, es que la famosa «mochila de Vallecas» nunca estuvo en los trenes de la muerte y fue colocada allí por quienes pretendían montar el día de reflexión la fábula del atentado de Al Qaeda para desarrollar después la novela negra del asalto a las sedes del PP y el vuelco electoral. Un proyecto de demolición que en apenas dos años ha liquidado el régimen constitucional por su base, que es la soberanía nacional española.

Viendo los resultados, pocas dudas caben del éxito de los terroristas.Del de los islamistas es buena prueba la Alianza de Civilizaciones.Del de los etarras, el proceso de liquidación de España, casi rematado ya en lo que respecta a Cataluña y casi a punto de comenzar en lo que al País Vasco respecta. Pero siendo esto atroz, podría ser fruto de un Gobierno equivocado, de una falta de patriotismo por parte de Zapatero o de un egoísmo sectario de la izquierda que prefiere pactar con los separatistas antes que con el PP.Hay algo todavía peor. Viendo los esfuerzos por borrar las pruebas del 11-M o por inventarlas desde el 13-M hasta hoy, cada vez es más difícil dudar de que estamos ante la más infame manipulación en toda la Historia de España, por lo menos desde la falsa crucifixión del 'Niño de La Guardia' achacada a los judíos para asesinarlos o desde los caramelos supuestamente envenenados achacados a frailes y jesuitas para expulsarlos.

Ni la mochila, ni la furgoneta de Alcalá, ni el Skoda Fabia.Nada de nada. Las pruebas que permitieron montar el timo del 13-M se han venido abajo como un castillo de naipes. Quizás porque, como sucedió en el 23-F y en otras intentonas golpistas donde anduvieron de por medio nuestros servicios de Inteligencia, la chapuza acabó sepultando la malicia y el estilo de Mortadelo y Filemón se impuso al de Le Carré.

El sumario hace agua por los cuatro costados. Y media España mira a la otra media con auténtico horror.