UNA APROXIMACION CAUTA A LAS ELECCIONES DEL 12 DE MARZO

Luis Bouza-Brey, 9-3-00

 

Tenemos elecciones a Cortes en 3 días y no me atrevo a hacer un pronóstico, aunque sí me imagino tres escenarios posibles:

a) El PP gana con "mayoría suficiente", de entre 165 y 170 escaños.

b) El PP gana por poco, pero sumando a CIU y CC alcanza mayoría absoluta.

c) El PSOE gana por poco o pierde frente al PP, pero sumando a IU, BNG, PNV, y algún pequeño partido más puede formar gobierno. CIU, o CC, o ambos, adoptan una posición de distanciamiento con respecto al PP y de no oposición inicial al PSOE.

Estos son tres escenarios posibles, sobre los que puede haber pequeñas variaciones, y que son los que me parecen más probables. Pero no me atrevo a hacer pronóstico, pues aunque las encuestas dan una ventaja suficiente al PP, la movilización de los abstencionistas o el voto oculto no detectado en las encuestas, pueden cambiar las previsiones de estas últimas.

Por ello, me voy a limitar a dar una opinión personal sobre las opciones en juego, y los posibles beneficios, perjuicios y consecuencias de cada uno de los resultados probables.

 

¿POR QUÉ PUEDE GANAR EL PP?

Porque la economía ha funcionado bien estos últimos años, y la gente ha notado una mejora importante en este ámbito: bajadas de las hipotecas, reducción de la inflación, incremento del empleo, reducción del IRPF...

Es posible que haya bastante gente que vea así las cosas y vote a favor del PP en función de ello.

Pero, ¿por qué no se tiene por segura dicha victoria si las cosas van tan bien?

Porque creo que hay mucha gente que tiene la sensación de que el PP está fallando, y bastante, en cosas importantes: está atacando las bases del sistema democrático al reducir el pluralismo de los medios de comunicación e incrementar la oligopolización de la economía con una política de privatizaciones inaceptable; además, no parece tener claro cómo culminar el desarrollo del Estado autonómico, cerrándose en banda de tal manera que incluso rechaza la reforma del Senado, a diferencia de lo que mantenía hasta hace bien poco; mantiene, por último, una orientación errática, oscilando entre centrismo y sectarismo, lo que dificulta la adopción de las necesarias políticas de consenso y pactos de Estado. Actúa, en fin, por puro tacticismo, sin dar la medida, en muchas ocasiones, de la altura necesaria para resolver los graves problemas básicos del país.

Por eso el PP puede no ganar o ganar por poco.

 

¿POR QUÉ PUEDE GANAR EL PSOE?

En primer lugar, por las deficiencias generales del PP y por haber conseguido medio superar la crisis de liderazgo y proyecto que lo lastraba hasta hace bien poco. Pero además, porque la coalición con IU significa o puede significar, si se consolida en el largo plazo, una innovación política importante, poniendo al PSOE en una orientación de izquierda clara y haciendo entrar a IU en una actitud no sectaria y de realismo político.

No obstante, creo que hay la impresión de falta de maduración de la nueva situación en el espacio de la izquierda, y es posible que haya sectores de votantes que no se movilicen.

Si a ello le añadimos que los sectores más centristas del electorado posiblemente crean que es necesario que la derecha se estabilice en el centro mediante un nuevo período en el poder, esto puede restar votos al PSOE y sumarlos al PP.

Pero también opino que hay la sensación de que el PP carece de empuje y proyecto para resolver el laberinto español y culminar el desarrollo autonómico y la pacificación de Euskadi, y esto puede restarle votos también en este sector.

Es decir, que la cosa está poco clara: no se puede pronosticar la magnitud de la movilización de la izquierda ni los matices, pesos y contrapesos que pueden decidir la votación del centro y la orientación y magnitud de sus diversos sectores.

 

¿NO CONVENDRIA IR PENSANDO EN CUALQUIERA DE LOS DOS ESCENARIOS MAS COMPLICADOS?

Si cualquiera de los dos grandes partidos gana por poco, el asunto de la decantación de las alianzas va a ser crucial, y va a exigir mucha finura por parte de los líderes. Pero permítanme manifestar un deseo que es resultado de un análisis prospectivo:

Si se diera cualquiera de los escenarios de victoria por poco margen, nos vamos a encontrar con que es necesario poner freno al deterioro de la democracia, al cierre del sistema económico, y evitar un posible colapso del modelo de la estructura del Estado previsto en la Constitución.

Por ello, va a ser necesario formar un amplio bloque de fuerzas heterogéneas para adoptar medidas firmes referentes a políticas de rango estructural básico. ¿Podrá hacerlo el PP, será consciente de la necesidad de estas políticas? ¿Podrá hacerlo el PSOE, podrá encabezar una coalición de fuerzas tan heterogéneas con la firmeza suficiente como para formar una "coalición ganadora" operativa?

Gane quien gane, en el caso de cualquiera de las victorias por escaso margen, es necesario que los dos grandes partidos no se cierren en banda e intenten llegar a acuerdos, pues es mucho lo que nos jugamos y la situación va a ser muy complicada y difícil de gobernar en la buena dirección.