¿DE QUÉ HABLAN?
Artículo de Joaquín Leguina en “La Gaceta” del 30 de octubre de
2010
Por su interés y relevancia he
seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.
Los políticos y los medios de comunicación españoles también tienen un
muy agudo reflejo condicionado y acuden al engaño cada vez que ETA y sus
mariachis tocan la campanilla.
Paulov –un científico ruso que nunca creyó en las tesis de Darwin
sobre la evolución– ha pasado a la historia gracias a un perro. Un can que se
movía hacia la comida cuando el tal Paulov tocaba una
campanilla. Este fenómeno perruno se denominó Reflejo Condicionado.
Contando
con mayor inteligencia, formación y lenguaje, sin embargo, los políticos y los
medios de comunicación españoles también tienen un muy agudo reflejo
condicionado y acuden al engaño cada vez que ETA y sus mariachis tocan la campanilla…
y ahora la están tocando a tutta orchestra
respondiendo –eso parece– no a impulsos pacíficos que les debieran llevar a
anunciar su autodisolución sino a otra necesidad pauloviana:
la de participar en las próximas elecciones, porque ya saben que “fuera hace
mucho frío”.
Ante
tales movidas, lo correcto sería –a mi juicio– disfrazarse de don Tancredo, es
decir, callar, estarse quieto, mirar para otro lado y colocar en la puerta de
cada terrorista un solo cartel cuyo copyright pertenece a Dante: “Mientras
estés ahí pierde toda esperanza”. Esto es lo que se venía haciendo y de tal
actitud (y de la ley de partidos) los demócratas no han obtenido sino
beneficios. ¿Por qué enredarnos en dimes y diretes? ¿Qué prisa tenemos ahora
los demócratas? Ninguna prisa.
ETA
está perdiendo una guerra que nunca debió iniciar y la está perdiendo como
efecto de dos elementos: 1) la unidad de los demócratas y 2) la eficacia
policial española y francesa. Son esas medicinas las que han hecho el milagro:
al fin los héroes están cansados. Cualquier estratega nos diría que no nos
conviene cambiar el tablero. Es a ellos a quienes corresponde mover ficha.
¿A
cuento de qué cambiar de estrategia cuando vamos ganando? A no ser, claro está,
que algunos piensen que en Euskal Herría
existe un conflicto de fondo y que eso explica la existencia del terrorismo
etarra. Un argumento que no se puede ni se debe aceptar. Al contrario, el
conflicto son ellos y en sus manos está el resolverlo. ¿Cómo? Entregando las
armas.