EL GOBIERNO SE JUEGA LA HUCHA DE LAS PENSIONES COMPRANDO DEUDA ESPAÑOLA: VENDE
ALEMANA Y VIOLA LA LEY
El Gobierno ha usado la hucha de las pensiones para comprar deuda pública
al Tesoro y lograr dinero para mantener su errática política de gasto. Ha
vendido bonos de Francia y Alemania (que son más seguros) para comprar
españoles (que son más rentables). Esto es ilegal.
Informe
de Lorenzo Ramírez en “Libertad Digital” del 10 de junio de 2010
Por su interés y relevancia he
seleccionado el informe que sigue para incluirlo en este sitio web.
El Fondo de Reserva de la Seguridad Social fue creado
en 2003 por el Gobierno de José María Aznar para constituir una hucha de las
pensiones que pudiera servir al Estado para financiar el sistema de protección
cuando entrara en números rojos. Es una caja en la que el Gobierno debe ir
metiendo todos los años el superávit de la Seguridad Social y destinar esos
fondos a inversiones totalmente seguras. Para ello creó una Ley que ahora el
Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero ha decidido violar.
El Gobierno ha decidido vender deuda francesa y
alemana que tenía en la hucha de las pensiones para comprar bonos españoles. Es
decir, que cambia productos financieros de la máxima calidad por otros de menor
solvencia, cambiando rentabilidad por seguridad.
Esto va contra la Ley 28/2003, de 29 de septiembre, reguladora del Fondo de
Reserva de la Seguridad Social, que establece que el Fondo sólo puede invertir
en deuda "que tenga la máxima calidad crediticia", y la española, desde enero de 2009, ya no lo es.
Los datos aparecen en el informe que la secretaria de
Estado de la Seguridad Social manda todos los años a las Cortes Generales. En
concreto, durante el pasado año el Comité que gestiona la hucha de las pensiones
decidió vender (enajenar) deuda pública alemana y francesa por un importe de
5.194 millones de euros, para comprar deuda pública española.
El informe oculta que los bonos germanos y galos
tienen la máxima nota de las tres agencias calificadoras (Moody´s,
Fitch Ratings y S&P), pero los españoles no. S&P rebajó por primera vez la calidad de la deuda
española en enero de 2009 y recientemente la ha vuelto a castigar. Por su parte Fitch tampoco confía en la
solvencia de las finanzas públicas españolas y Moody´s se prepara para rebajar
también la nota.
Esta estrategia del Gobierno se debe fundamentalmente
a los problemas que tiene el Estado para seguir vendiendo deuda española en los
mercados internacionales. Las rebajas de la calidad de los bonos y obligaciones
españoles obliga al Tesoro a elevar la
rentabilidad que ofrece a los compradores para que estos sigan adquiriendo
títulos a pesar de que ha aumentado el riesgo de impago del Estado español.
Pero la Seguridad Social quiere darle la vuelta al
argumento y defienden que esta decisión de utilizar el Fondo de Reserva de las
pensiones para financiar el extraordinario aumento del gasto público se debe,
precisamente, a la mayor rentabilidad que ofrece la deuda española respecto a
la de las locomotoras europeas (Alemania y Francia) y a otras economías
europeas que están mejor posicionados, como Suecia o Dinamarca u Holanda.
Así según explican fuentes del Ejecutivo "no
tiene sentido comprar ahora deuda de Alemania, Francia y Holanda como se hacía
en los últimos años (...) ya que saldría más caro y tendría una menor
rentabilidad". Lo que no explica el Gobierno es que esto se debe a que
estos tres países tienen una mayor solvencia de las cuentas públicas y, por lo
tanto, no deben elevar el tipo de interés que pagan por la deuda que emiten.
Siguiendo este peregrino enfoque, el Estado podría optar por comprar deuda
soberana de otros estados europeos que ofrezcan una mayor rentabilidad, como la
griega, lo quie viola la Ley.
El 90% del dinero de la hucha: deuda española
Y para 2010 las previsiones de la Seguridad Social son
preocupantes: el 90% del Fondo de Reserva de la Seguridad Social estará
invertido en deuda pública española, frente al actual 80%, según ha admitido el
secretario de Estado, Octavio Granado. Al cierre de 2009, el Fondo alcanzó una
cuantía de 60.022 millones de euros, según el informe anual.
El documento revela otra ilegalidad, ya que en 2009 el
supuesto superávit de 8.502 millones de euros que, según el Gobierno, registró
la Seguridad Social no ha sido inyectado en la hucha de las pensiones. Así lo
han denunciado fuentes de PP a Libertad Digital, que exigen, además, que
"se blinde" el Fondo de Reserva.
De esta forma se evitaría que el Gobierno recurra al
Fondo para elevar pensiones que no tienen que ver con la jubilación, lo que
aumentaría la capacidad de esta hucha para afrontar el problema financiero
derivado del envejecimiento de la población.
No obstante, con los 60.022 millones de euros que hay en la hucha sólo se
podría pagar a los pensionistas españoles durante 9 meses. Lo realmente
indispensable es reformar el sistema de protección, como exige el Eurogrupo y el Fondo Monetario Internacional (FMI). El
modelo español ocupa la "tercera división" de la UE.