MONTILLA PIDE AL PSC HACER CASO OMISO DE LAS TESIS DE SEVILLA PERO RECONOCE EL ENFRENTAMIENTO

El ministro de Industria suspende una reunión con su colega de Gobierno para mostrar el malestar

Montilla y el PSC quieren hacer saber al ministro Sevilla que sus reflexiones sobre el Estatut sólo dificultan aún más el debate. Ante esto, se recetan hacer caso omiso y Montilla evitará simbólicamente un próximo encuentro con su colega.

 Informe de  CRISTINA SEN   en “La Vanguardia” del 19/02/2005

Por su interés y relevancia, he seleccionado el informe que sigue para incluirlo en este sitio web. (L. B.-B.)

 
Después del evidente malestar que han causado en las filas socialistas catalanas las limitaciones expuestas por el ministro Jordi Sevilla sobre la reforma del Estatut, el antídoto va a ser la ignorancia y la relativización de las tesis del titular de Administraciones Públicas. Esta es la consigna que el ministro de Industria y líder del PSC, José Montilla, ha dado entre los cuadros del partido y que está dispuesto a aplicarse él mismo con el objetivo de no caer en una tira y afloja que puede hacer peligrar, según los socialistas catalanes, la elaboración del nuevo proyecto estatutario.

Para empezar, las fuentes gubernamentales consultadas señalaron que el ministro ha suspendido una reunión que tenía previsto celebrar con Jordi Sevilla dentro de unos quince días. La agenda del titular de Industria ya no facilitaba este encuentro pero el entorno del dirigente catalán vinculó directamente y sin ninguna duda esta anulación con el malestar que le ha provocado que su compañero de Gobierno pusiese las fronteras y las condiciones del nuevo Estatut.

Los motivos del malestar son variados pero, sobre todo, Montilla y los socialistas catalanes lamentan que el titular de Administraciones Públicas les obligue a replicar y les abra un frente de discusión interno, con sus socios del tripartito y con CiU. Buen ejemplo de ello es que el grupo de CiU ya ha pedido la comparecencia de Sevilla en el Senado para clarifique las "contradicciones" sobre el compromiso del presidente José Luis Rodríguez Zapatero sobre el Estatut. Resumido en lenguaje coloquial y clarificador, dirigentes del PSC destacaban que el ministro de Administraciones Públicas les ha "metido en un jardín".

En las filas del socialismo catalán ha causado sorpresa que el ministro fuese tan expeditivo -subrayó que el Estatut no puede afectar a leyes orgánicas y redefinir competencias- al entender que hasta el momento las negociaciones habían funcionado correctamente. Sevilla y Montilla ya han celebrado varias reuniones discretas con altos dirigentes del PSOE y del PSC para intentar unificar criterios con respecto a las reformas, y habían transcurrido más o menos con normalidad.

Es cierto que el pasado mes de diciembre Sevilla ya advirtió de que la redefinición de las competencias no pueden salir sólo de Catalunya sino que debe ser debatido con la otra parte afectada -el Gobierno central-, pero esta reflexión quedó enmarcada dentro de las normales negociaciones que se tendrán que abrir con el Ejecutivo para que el Congreso apruebe el Estatut.

Por ello, el PSC se receta ahora prescindir de las acotaciones expuestas por el ministro al entender que entrar en esta discusión va a dificultar en Catalunya la elaboración del nuevo Estatut. Pero las reflexiones que realizan algunos cargos muy importantes del Govern reflejan la sorpresa que han causado las citadas reflexiones. "Nosotros hemos dejado claro que el proyecto de nuevo Estatut apuesta por España, ahora el Ejecutivo tendrá que dejar claro que apuesta por Catalunya", señalaba en privado un alto representante del Govern.