MAREA NEGRA

 

 Artículo de Luis del Pino en “Libertad Digital” del 2-5-06

 

 Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.

 

 

Cuenta hoy El Mundo la curiosa peripecia de la cinta coránica de Alcalá, que habría sido entregada por la Policía al dueño de la furgoneta Kangoo, rompiendo así la cadena custodia de una de las pruebas del caso. Lo importante del artículo de Isabel Velloso es la enumeración de despropósitos referidos a las pruebas del 11-M. Cita, en concreto, seis casos que bastan para certificar las sospechas sobre las pruebas utilizadas para construir la versión oficial:

La propia cinta coránica, entregada "por error" al propietario de la furgoneta.

La manipulación de los informes de la Policía Científica, para ocultar que el explosivo de Vallecas no coincidía con el de la furgoneta de Alcalá.

La entrega al juez de una réplica de la mochila de Vallecas, como si fuera la auténtica.

La ocultación al juez durante cuatro meses de la readiografía que demostraba que la mochila de Vallecas estaba preparada para no explotar.

La pérdida temporal de la tarjeta de la mochila de Vallecas, tras su entrega a Amena para que realizara una prueba pericial.

La aparición del Skoda Fabia en Alcalá varios meses después del 11-M,

A estos seis puntos cabría añadir otros varios que se han ido publicando a lo largo de los últimos meses:

La ocultación al juez de que la furgoneta de Alcalá estaba vacía en el momento de ser encontrada.

La entrega al juez de informes donde se achacaba a Jamal Zougham la comercialización de una tarjeta telefónica que, en realidad, había sido comercializada por personas próximas a los hermanos Almallah.

La realización de ruedas de reconocimiento donde el único "moro" era Jamal Zougham.

La destrucción de las cintas del centro de control de la Policía donde se recogían las conversaciones relativas a la intervención en Leganés.

La desaparición ¿por ingestión? del papel donde Abdelkrim Benesmail tenía apuntados los teléfonos de los etarras Parot e Iragui.

La aparición de la cinta de reivindicación del 13-M en las manos de un policía nacional retirado.

¿Hay alguna prueba del caso sobre la que no pese una sospecha de manipulación? ¿Hay algo en el 11-M sobre lo que tengamos una certeza indubitada, aparte de la existencia de 192 víctimas mortales y centenares de heridos? ¿Hay algo que escape a esa marea negra de podredumbre que parece anegar todos los aspectos de la versión oficial?

El otro día comentaba que había algo extraño en la fotografía de la mochila de Vallecas entregada al juez y, efectivamente, varios de vosotros lo habeis detectado: la existencia en la bolsa de pliegues propios de un objeto que acaba de salir de su embalaje. Eso confirmaría lo que ya Fernando Múgica publicó hace mucho tiempo: que esa fotografía no corresponde a la bolsa original. Pero entonces, ¿cómo se entrega al juez esa foto como si fuera la de la original?

Teniendo en cuenta que el duplicado de la mochila de Vallecas fue adquirido en la tienda Rebiz Moda en la tarde del 17 de marzo de 2004, eso explica por qué en el sumario no aparece ninguna foto de la mochila (ni de su contenido) antes del 17 de marzo.

Pero entonces, ¿dónde están las fotografías que forzosamente hubieron de hacerse a la mochila de Vallecas antes del 17 de marzo? ¿Por qué se le han ocultado al juez?

¿Por qué no existe ningún testimonio gráfico de esa inscripción "EFsMg" que nos dicen que había en la mochila de Vallecas?

Seguiremos informando sobre éstas y otras cuestiones.

 

 

LA FURGONETA DE LAS MARAVILLAS

 

Artículo de Luis del Pino en “Libertad Digital” del 3-5-06

 

 Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.

 

Al juez Del Olmo le han colado dos fotografías idénticas como si correspondieran a dos restos de explosivo distintos: el de la bolsa de Vallecas y el de la furgoneta de Alcalá. O, para ser más exactos, en el informe técnico-policial donde se describe el contenido de la furgoneta de Alcalá le han colado una fotografía del explosivo encontrado en la bolsa de Vallecas. Parece mentira lo bien que funcionan las máquinas de clonación de restos de explosivo. Las máquinas fotográficas, me refiero.

Pero revela Fernando Múgica que no acaban aquí los trucos de prestidigitación: la aparición de una tarjeta del Grupo Mondragón en el salpicadero de la Kangoo fue ocultada a la opinión pública, a las autoridades del Ministerio de Interior y al propio juez Del Olmo. Lo importante no es el hecho en sí de la aparición de esa tarjeta, que no tiene por qué significar nada, sino el episodio de ocultación y sustitución de pruebas que se ha producido en torno a la furgoneta.

En esa furgoneta, cuando los policías llegan al lugar:

 

la zona de carga estaba vacía

había una tarjeta del Grupo Mondragón en el salpicadero,

había un chaleco reflectante debajo del asiento del copiloto

se veía una cinta de casete sin inscripción ninguna encima del asiento del copiloto

por supuesto, no había ningún resto de explosivo

 

Después de llevar la furgoneta a dependencias policiales:

 

aparecen en la zona de carga ropa, documentos y una multitud de otras evidencias

ya no está la tarjeta del Grupo Mondragón

debajo del asiento del copiloto no hay un chaleco reflectante, sino una bolsa de basura con detonadores

desaparece la cinta sin inscripciones del asiento, y aparece otra con inscripciones árabes dentro del radiocasete

aparece un resto de explosivo del que, sin embargo, no hay fotografías ni descripción ninguna

Creo que sobran los comentarios. Tan sólo una pregunta: ¿qué contenía la cinta que había inicialmente sobre el asiento del copiloto?