COMUNICADO DE LOS PORCHES
A un año vista del primer
Congreso de UNIÓN PROGRESO Y DEMOCRACIA, los ex afiliados reunidos en Madrid a fecha 20 de
noviembre de 2010, nos reafirmamos en los postulados que nos movieron a abandonar
la militancia en el partido y hoy queremos hacer público a la sociedad española
lo siguiente:
1. UPyD es un fraude político. Nació como un proyecto
inicialmente renovador y de carácter regenerador, que hoy se ha convertido en
un instrumento utilizado exclusivamente para servir a los intereses
personales de su portavoz: Rosa Díez.
2. La dirección de UPyD, desde la
fundación del partido, ha ejercido la persecución
del discrepante, ha amputado de manera intencionada todos los cauces de
comunicación entre los afiliados y ha actuado de manera caudillista, imponiendo
un férreo modelo de organización interno que no coincide con las propuestas
regeneradoras que supuestamente se plantean a la sociedad española.
3. En UPyD se practica un estilo de toma
de decisiones basado en el autoritarismo y en la cooptación, lo que ha
propiciado que muchos militantes de toda España hayan optado por arrojar la
toalla y abandonar el partido. La formación se encuentra a día de hoy rota en
toda España, habiendo perdido miles de militantes en una sangría que continua
hoy con nuevos expedientados.
4. El colapso interno del partido tiene también su reflejo en sus
propuestas políticas y programáticas, muchas de ellas coyunturales, como el
apoyo a algunas causas con fines puramente electorales, y otras insólitas como
el “federalismo cooperativo de
intensidad media”. UPyD ha suprimido buena parte de sus principios
liberales y transversales de su planteamiento político y se limita a reiterar
algunas vagas generalidades que no sirven como solución a la grave situación
política y económica que vivimos en España.
5. En el futuro electoral que se nos presenta creemos que es un
ejercicio de responsabilidad poner de manifiesto que el voto a UPyD es el voto a un fraude político, que tras una
envoltura y un discurso supuestamente atractivo para muchos, su interior es
amargo y falso.
6. El
tratamiento sancionador dado a quienes defendieron la ponencia contraria al
reglamento del Congreso aprobado en marzo del 2009, fue profundamente antidemocrático
y contrario a las reglas vigentes tanto en el partido como en la legislación
española.
7. El resto de los militantes que nos adherimos y solidarizamos con
ellos y presentamos posteriormente una candidatura alternativa a la oficial,
avalada por Rosa Diez, fuimos laminados e insultados en dicho Congreso,
el cual se celebró sin las mínimas garantías democráticas y lejos del clima
abierto que cabría esperar de un partido que se presenta como regenerador de la
democracia española.
8. La preparación y el desarrollo del primer Congreso de UPyD mostró desde el primer momento que asistíamos a un golpe
de mano dirigido por el triunvirato que encabeza Rosa Díez, y que en ningún
caso se iba a permitir un modelo de partido distinto al previamente diseñado
por ellos: una organización con escasos afiliados, despojados de cualquier
capacidad democrática de decisión y exclusivamente al dictado de Carlos Martínez Gorriarán, Juan Luis Fabo y Rosa Díez.
9. Nuestra dimisión y auto-exclusión en bloque tras el Congreso, la
apertura de expedientes a la mayoría de miembros de la candidatura, incluido Valia Merino que la encabezó, vinieron a confirmar que UPyD se había transformado en otro partido y que buscaba
otros objetivos completamente distintos de los fundacionales. En la actualidad UPyD apenas cuenta con una militancia exigua y menguante
cuya capacidad de acción se encuentra cercenada por la dirección de la
formación.
10. A día de hoy han fracasado todos los intentos de construcción de
una alternativa política regeneradora en España. Con rotundidad y con plena
responsabilidad decimos que votar a UPyD es avalar
una enorme mentira política.