ZAPATERO SE VISTE DE CORDERO



 Artículo de
Pablo Sebastián en “La Estrella Digital” del 18.04.07

 

 Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.

 El formateado es mío (L. B.-B.)

 

Con una pregunta a pie de título:

 

 ¿PERO AUN LE QUEDA CREDIBILIDAD, AL FLAUTISTA DE HAMELIN? ¿QUE PRETENDE, GIRAR AHORA 180 GRADOS? ¿NO VOLVERA A GIRAR OTROS 180 EL 1 DE JUNIO?

 (L. B.-B., 18-4-07, 00:05)

 

El presidente Zapatero se dio un paseo, sin obstáculos, por el plató de Antena 3 TV, en el curso de una pésima entrevista centrada en asuntos de actualidad pero sin tocar los temas de fondo del debate nacional. Del encuentro con los tres conversadores no salió novedad alguna digna de mención, como lo reconoció al final la propia anfitriona de la cadena, Lomana, al decirle al presidente que les dejaba sin titular sólo por no comprometerse a acudir en Antena 3 a un debate preelectoral con Rajoy.

La única novedad es que Zapatero ha desempolvado su traje de cordero, el de las citas electorales, y a partir de ahora lo volveremos a ver con su discurso de la paz, los pobres, el feminismo, las conquistas sociales y la economía va bien, aparcando la crispación con el PP —de lo que se encarga José Blanco—, y ofreciéndole la mano a Rajoy para una nueva reunión en la Moncloa para el mes de junio, donde le piensa volver a tomar el pelo como en las anteriores. Y, a ser posible, después de haberlo derrotado en el recuento nacional de las elecciones municipales, de las que Zapatero dijo que va a ganar, que no son unas primarias o preámbulo de las generales, aunque no sabe si van a ser unas primarias para Rajoy y el PP, si pierden.

Y eso sí, ahora se llena la boca de unidad con el PP frente al terrorismo, porque el nuevo cordero le ve las orejas al lobo de ETA, y porque nadie le pregunta o le echa en cara su decisión fracasada de ir a negociar con ETA sin el consenso del PP, de la mano de los nacionalistas y dispuesto a hacer concesiones políticas como el encuentro del PSE con Batasuna, la mesa política de negociación, la excarcelación de De Juana y la legalización de la nueva marca de Batasuna ANV, que está al caer si nadie lo remedia. A buenas horas nos dice el presidente que “no puede haber diálogo con violencia”. Entonces ¿por qué negoció con la banda cuando ETA estaba en plena actividad?

Zapatero habla de diálogo con Rajoy y de unidad con el PP como si nada hubiera pasado en estos años, y nadie se lo recrimina ni entra en el fondo de la crisis de la legislatura y de la vigente crispación que tiene su origen en el pacto del PSC y del PSOE con la Esquerra y en el Estatuto soberanista de Cataluña, como primera piedra de la reforma del Estado hacia un modelo confederal y como pista de ensayo y de aterrizaje de ETA, que a la banda le ha resultado insuficiente, derrumbando con la bomba de Barajas el castillo de naipes de Zapatero. Éste es el núcleo duro de la crisis española, y todo lo demás son anécdotas de actualidad.

Y ése es el fracaso del presidente Zapatero temerario e improvisador, como lo revela el libro de su ex colaborador Valenzuela, donde descubre que el presidente es incapaz de medir sus pasos, el alcance de sus decisiones, que improvisa y no trabaja en equipo, etcétera, y no la tontería de si habla por el móvil que le preguntó Valentín en el papel de camarada del PSOE, a la vez que Urdaci desempeñaba el rol de periodista tonto del PP de Aznar, dando al presidente la oportunidad de soltar su rollo sobre la política económica y social. El mismo cuento que les quiso colocar a los ciudadanos que hace días lo entrevistaron en TVE, cuando descubrió que no sabe el precio de un café.

Pues eso, la conversación, más que una entrevista, fue como una charla de café sin el menor interés o trascendencia y sin respuestas de verdad. Sobre Endesa, Zapatero volvió a mentir porque de lo que se trataba era de echar a Manuel Pizarro y de poner la compañía al servicio de los nacionalistas de CiU o del PSOE, a medias con Prodi. Y nada ha salido bien, por más que hable del precio de las acciones —ése es mérito de Pizarro, que luchó contra la OPA zapaterista de Gas Natural—, y aunque diga que no le preocupa lo que pueda decir Conthe en el Congreso —“Manolo” lo llamó—, pero lo cierto es que han intentado silenciarlo hasta que no lo han podido evitar.

Zapatero, siguiendo los consejos de sus expertos en imagen, se ha puesto el traje de cordero y se ha dado un paseo por Antena 3 TV, visitó los estudios, acompañado por Lara, y luego se tomó, tan campante, un cafelito gratis en el plató.