EL VIAJE DE RAJOY Y LAS FACTURAS PENDIENTES DE ZP CON MARRUECOS

Artículo de Federico Quevedo  en “El Confidencial” del 16 de septiembre de 2010

Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.

 

El líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, viajó ayer por la tarde a Melilla donde hoy va a ser recibido por el presidente de esta ciudad autónoma, Juan José Imbroda. En circunstancias normales esto no tendría mayor relevancia, pero ayer el Gobierno de Marruecos montó en cólera y acusó al líder del PP de “provocación”.

Si este fuera un país normal, y cuando digo normal me refiero a una democracia consolidada en la que se respetan las reglas del juego y, sobre todo, las libertades y derechos de sus ciudadanos, incluida la libertad y el derecho para moverse por el territorio nacional, y esa libertad y ese derecho estuvieran protegidos como debieran por el Estado, lo lógico hubiese sido que, de inmediato, el Gobierno y, sobre todo, su representante en lo que a la política exterior se refiere, Miguel Ángel Moratinos, salieran en defensa de ese derecho y de esa libertad del señor Rajoy para viajar a una ciudad española cuando le venga en gana y por las razones que le parezcan oportunas. Pero no. Este es un Gobierno de cobardes, malditos cobardes, que se baja los pantalones ante todo sátrapa-caudillo-dictador que pueble la tierra, a costa de la dignidad nacional y nuestro orgullo como país.

Verán, lejos de cumplir con su obligación como titular de Exteriores y, por lo tanto, como defensor de los derechos y las libertades de nuestros ciudadanos, entre los que se encuentra nuestros dirigentes políticos, dentro y fuera de nuestras fronteras, lo que ha hecho Moratinos es aún más grave: ha amenazado al PP.

El martes por la tarde, sin ir más lejos, lo hizo en el Senado ante una interpelación del portavoz de Exteriores, Alejandro Muñoz Alonso, a quien le dijo, textualmente, que en Marruecos “toman nota” de la actitud del PP, y le reprochó que su partido critique las violaciones de los derechos humanos que se practican en aquel país. Lo dije una vez, cuando las agresiones y torturas a los activistas españoles, y lo reitero: me alegro de que de una vez por todas los progres comprueben hasta donde llega la doble moral de este Gobierno y su cobardía vergonzante cuando se trata de defender los derechos humanos en lugares como Marruecos o Cuba.

Si se tratara de Chile o Argentina en tiempos de la dictadura, otro gallo cantaría. Pues bien, según Moratinos, Marruecos toma nota… Y eso, ¿qué significa? Porque la experiencia dice que las ‘notas’ que toma Marruecos suelen tener consecuencias a veces muy dolorosas, y si fuera así cabría recordarle en el futuro a Moratinos sus palabras, cargadas de la demagogia totalitaria y sectaria a la que ya nos tiene acostumbrados.

Miren, lo que va a hacer hoy Mariano Rajoy es lo razonable: defender nuestra dignidad nacional ante lo que este verano ha sido una campaña vergonzante y vergonzosa de acoso por parte de las autoridades marroquíes a nuestras policías, a los ciudadanos de ambas plazas –Ceuta y Melilla- y a aquellos que libremente han elegido el camino de la defensa de los derechos de los saharauis. De eso de defender derechos sabía mucho, antes, un tal Rodríguez, que ahora se esconde debajo del turbante de Mohamed VI para no tener que dar explicaciones por su actitud humillante ante un dictador y un sátrapa que permite que en su país se violen constantemente los derechos humanos.

Pero, fíjense hasta donde llega la doble moral y el doble lenguaje de este Gobierno, que el mismo Moratinos que hace unos meses defendía el derecho de la ‘flotilla’ a invadir aguas territoriales israelíes para llevar, supuestamente, ayuda a los palestinos y protestar por su situación, violando la normativa y las leyes de Israel, ahora dice que los activistas españoles a los que la policía marroquí torturó este verano tenían que haber respetado esas mismas normas y leyes porque venían de Rabat. ¡Ah! Que si son de Rabat, si valen, pero si son de Tel Aviv, no. Impostura, engaño, mentira y cobardía. Pura cobardía. Humillante y vergonzante cobardía.

Ahora resulta que es Rajoy el que ha ‘provocado’ a Marruecos. No han sido ellos, claro, los que nos han estado provocando durante todo el verano, que va. Eso era lo normal. Que insultaran y vejaran a las policías españolas, eso no es denunciable porque como, además, forma parte de su cultura tratar a la mujer como si fuera un espantajo, hay que respetarlo… ¡No te j…! ¿Y nos tenemos que aguantar, y quedarnos tan tranquilos? Pues a lo mejor resulta que no nos da la gana. A lo mejor resulta que muchos nos seguimos preguntando qué precio está pagando Rodríguez a Marruecos y porqué, y si al final de todo esto va a resultar que más de seis años después todavía seguimos pagando las facturas de cuando Rodríguez llegó al Gobierno en marzo de 2004 y como lo hizo, y si todo eso tiene algo que ver con el resurgimiento de la amenaza de Al Qaeda contra España y la reavivación de las llamadas fanáticas a la ocupación de Ceuta y Melilla, como primer paso para la particular reconquista de Al Andalus.

Moratinos y Rodríguez tienen que dar muchas explicaciones, pero siguen escondiéndose tras el caftán del monarca alauita.