DE NUEVO ARRIOLA: RAJOY ECHÓ EL FRENO EN EL DEBATE TRAS RECIBIR LOS CONSEJOS DEL GURÚ DEL PP

 

 Artículo de Federico Quevedo en “El Confidencial com” del   26.02.2008

 

 Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.

 

Con un brevísimo comentario al final:

 

IMPRESIONES DEL DEBATE

 

Luis Bouza-Brey, 26-2-08

 

¿Tuvo algo que ver Pedro Arriola con el hecho de que, tras el descanso, Mariano Rajoy moderara, sensiblemente, el tono de su intervención? Fuentes del PP así lo aseguran. Lo cierto es que, hasta ese momento, el líder del PP mantuvo una presión casi sofocante sobre su adversario, José Luis Rodríguez Zapatero. Pero llegó el intermedio, tras los tres primeros bloques –economía, políticas sociales y seguridad-, y Arriola fue el único que pudo acercarse a Rajoy y hablar con él. ¿Qué le dijo?

Sólo lo saben los dos protagonistas, pero a partir de ese momento en el imaginario colectivo del PP aparecieron, como por arte de magia, los dos debates de Aznar con González, aquel primero vibrante y el segundo complaciente, que también contó con el asesoramiento de Arriola. Sin llegar a ese extremo, lo cierto es que Rajoy comenzó la segunda parte del debate, tras la publicidad, conscientemente más comedido que la primera, lo que permitió a Rodríguez Zapatero crecerse e, incluso, llegar a plantear algún aprieto al líder del PP.

En Génova señalan, sin embargo, que todo ello formaba parte de la estrategia que ya llevaba prepara Rajoy de antemano, y que el líder del PP no quería “avasallar a Zapatero, porque eso hubiera movilizado en exceso al electorado de izquierda”. Arriola defendió en el 93 que el PP perdió las elecciones en el primer debate, porque la izquierda se “asustó”, y que por eso Aznar fue más cauto en el segundo. Otros piensan, sin embargo, que el segundo debate le dio vida a González.

De hecho, fuentes de Génova señalan que el líder del PP es consciente de que ayer ‘provocó’ a Zapatero, y de que el presidente sacará toda su ‘artillería’ el próximo lunes, razón por la que el propio Rajoy se ha guardado ‘ases en la manga’, como recordarle, por ejemplo, la oferta de consenso que le hizo a Zapatero el 14 de enero de 2006 y que el presidente rechazó de plano. Y es que en el PP, donde la satisfacción es imposible de ocultar, crece la sospecha de que el próximo lunes Rodríguez Zapatero enseñará otra cara y “sacará las uñas”, según señalaba a este diario un miembro de la Dirección.

Descanso y mitin en Bilbao

Mariano Rajoy se ha tomado la mañana del martes como descanso y para empezar a preparar el segundo debate que le enfrentará el próximo lunes con José Luis Rodríguez Zapatero, en el mismo plato, aunque en distinto escenario y con moderadora: Olga Viza. Por la tarde acudirá a un mitin en Bilbao, pero hasta entonces el líder del PP ha preferido quedarse en su despacho personal mirando papeles y revisando las notas que ayer mismo aprovechó para tomar durante su primer cara a cara con Zapatero.

La ‘moral’ en Génova 13, bastante deteriorada después del debate de la semana pasada entre Solbes y Pizarro, está ahora muy alta. Lo de menos son las encuestas: “Al preguntar quien ganó, si Zapatero o Rajoy, a Rajoy solo lo votan los del PP o los que vayan a votar al PP, pero a Zapatero le votan además de los socialistas, los nacionalistas y el resto de la izquierda, incluso los que vayan a quedarse en su casa. Y aun así la diferencia ha sido muy pequeña, lo que dice mucho del verdadero resultado”.

Esa es la explicación que dan en Génova 13, pero también la que aportan los propios expertos en sondeos de opinión. Era muy difícil que el debate lo ganara Rajoy en las encuestas, aunque realmente lo haya ganado de cara a la opinión pública, porque estas elecciones se presentan con una decisión de voto muy polarizada y un gran componente de aceptación/rechazo para cada uno de los líderes.

Y en ese sentido Zapatero tiene las de ganar frente a Rajoy, pero luego en las elecciones se presentan otros partidos, por lo que el resultado de estos sondeos, dicen estas fuentes, “no es extrapolable al resultado electoral”. En lo que sí confían en Génova 13 es en que el debate de ayer haya servido para afianzar la imagen de Rajoy y, sobre todo, para transmitir seguridad a sus potenciales votantes, y que incluso haya podido arrancar algún voto indeciso.

 Brevísimo comentario final:

 

IMPRESIONES DEL DEBATE

 

Luis Bouza-Brey, 26-2-08

 

Creo que Rajoy ganó en la parte del debate que fue él mismo, y perdió cuando se acartonó recitando memorísticamente la historia de la niña. Si Rajoy quiere ganar las elecciones debe ser tal como es, racional y apasionado, y pintar la situación tal como es, como una catástrofe obra de ineptos.

Si hace eso, si denuncia la inepcia, la situación catastrófica, la mentira y la demagogia, a quien movilizará será a la mayoría absoluta del país, que le apoyará como protagonista de un movimiento de salvación nacional.

Por el contrario, si tiene miedo a ser agresivo y realista, para no provocar el voto de unos cuantos pirados de ultraizquierda, conseguirá desesperanzar a mucha gente, que se quedará en casa hasta que tenga que salir de una vez dentro de algún tiempo ante la catástrofe consumada por ZP y aliados.

El país está esperando un líder con empuje, sensatez y firmeza que nos saque del pozo, y Rajoy puede ser ese líder si se deja de miedos y acartonamientos. Si Rajoy se convence de que debe ser él mismo, ganará de calle.

Rajoy 10 y Rosa 10, más alguien del PSOE que surja después de un Congreso, pueden retomar impulso  para sacar el país adelante. Pero hace falta razón, pasión y rebeldía, y estoy seguro de que Rajoy puede desempeñar ese papel. Le necesitamos, España le necesita así, y no recitando de memoria historietas. Si en el próximo debate Rajoy fuera capaz de construir mentalmente la proyección de la desastrosa situación actual del país hacia el futuro si Zapatero continúa gobernando, y diseñar una alternativa ilusionante y sensata para salir del caos, se llevaría las elecciones de calle. Pero tiene que hacer él el diseño, y creérselo, y verbalizarlo. Y lo puede hacer si se decide a ser él mismo.