TODOS CONTRA TODOS: LOS RECURSOS POR EL CONTROL DEL AGUA DESBORDAN AL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

 

 Noticia en   “La Razón” del 12.07.06

 

 Por su interés y relevancia he seleccionado la noticia que sigue para incluirla en este sitio web.

 

El Gobierno de Castilla-La Mancha acordó ayer recurrir al Tribunal Constitucional el nuevo Estatuto valenciano, cuyo artículo 17 recoge el derecho de redistribución de los sobrantes de aguas de cuencas excedentarias. La comunidad manchega se suma así a la batalla constitucional entre comunidades por la cuestión del agua. Primero fue Cataluña, que quiso blindar las aguas del Ebro. Le siguió Andalucía, que pretende disponer en exclusiva del Guadalquivir. Más tarde Valencia, que incluyó en su Estatuto el artículo ahora recurrido. Aragón quiere su parte del Ebro frente a catalanes y valencianos. Y no se descarta que Castilla y León, Extremadura y La Rioja sucumban también a la fiebre de blindar el agua como quien le

pone puertas al campo. Una de las consecuencias más nefastas que ha traído aparejado el insolidario Estatut catalán es, precisamente, la sustracción del agua de las competencias del Estado, suscitando una carrera entre las diferentes autonomías para controlar los ríos que llega a situaciones tan absurdas como proclamar la soberanía sobre cuencas hidrográficas que discurren por varias comunidades.

La situación ha llegado a extremos tan alarmantes que o bien el Estado retoma su autoridad y competencias para poner orden en este guirigay o el agua acabará arrasando los últimos restos de solidaridad entre los españoles. La derogación parcial del Plan Hidrológico del PP no ha sido sustituida por una política hidrológica de Estado que coordine la cooperación entre las autonomías.