UNA AGRESIÓN A NUESTRA DEMOCRACIA

 

 Artículo de Justino Sinova en “El Mundo” del 09.10.06

 

 Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.

 

Hay noticias de que se prepara la reunión de la llamada «mesa de partidos». O sea, estamos en vísperas de que se cometa una agresión a nuestra democracia. Primero, porque se van a sentar comisionados de partidos en un foro exigido por ETA; segundo, y esto es lo más significativo, porque van a hacerlo fuera de las instituciones democráticas y para tomar acuerdos que serán impuestos a las instituciones democráticas. Y todo eso se va a realizar con el mandato del presidente del Gobierno, con el beneplácito del ministro del Interior, con la adhesión de unos partidos políticos y en medio del silencio de los que tenían que protestar por un golpe antidemocrático que va a ocasionar un patente desgaste a nuestro sistema.

Es lamentable tener que recordar que el escenario del debate político con efectos para los ciudadanos en una democracia es el Parlamento, donde se reúnen los representantes que los propios ciudadanos han elegido para que tomen decisiones. En él no tienen cabida quienes no han solicitado el voto de los ciudadanos y quienes no lo han obtenido. Pero Zapatero va a aceptar que esta institución esencial de la democracia sea suplantada por otro «parlamento» exigido por los pistoleros de ETA, en el que además estarán presentes los «representantes» no de los ciudadanos sino de los terroristas.

El único partido que no va a participar en esa falsificación es el Popular, pero el Socialista, el Nacionalista Vasco e Izquierda Unida parecen entusiasmados con la idea de sentarse a debatir con los apoderados etarras encuadrados en Batasuna. Esta organización, incluida en la lista internacional de montajes terroristas, es, por supuesto, ilegal, pero antes de la reunión se procurará su legalización, que no podrá realizarse sino mediante el forzamiento de la letra de la ley pues ya han dicho sus voceros que no están dispuestos a modificar sus planteamientos.

Todo esto se prepara mientras sigue habiendo terrorismo, mientras los pistoleros continúan extorsionando a ciudadanos y mientras ETA insiste en sus exigencias por las que ha estado asesinando durante cuarenta años: la independencia del País Vasco y la anexión de Navarra. No se dan las condiciones mínimas requeridas por el Parlamento cuando autorizó a Zapatero a tener un contacto con la banda, pero el presidente va a aceptar la imposición etarra del método. La banda ya está erosionando gravemente nuestras instituciones. El asalto al sistema se producirá en el instante en que la llamada «mesa de partidos» se reúna.