AZNAR PROPONE UNA OTAN REFORMADA CON EL TERRORISMO ISLAMISTA COMO OBJETIVO
Pide la ampliación a Japón, Australia e Israel y la creación de un fondo para promover la democracia
La OTAN está en crisis. El tradicional papel de defensa de sus miembros ante un estado enemigo ha caducado. La primera propuesta para la reforma de la Alianza la presenta hoy José María Aznar y tiene un claro objetivo: poner al terrorismo islamista en el punto de mira.
Informe de Mauricio Sánchez Rubio en “La Razón” del 16.11.05
Por su interés y relevancia he seleccionado el informe que sigue para incluirlo en este sitio web.
Madrid- La OTAN tiene abierto un proceso de aportación de propuestas para su reestructuración que
culminará en 2015. El primer y exhaustivo trabajo con ideas nuevas lo presenta hoy el presidente
de FAES en Washington. Para conseguir el mayor consenso posible en una organización actualmente
muy dividida tras la toma de posiciones de la guerra de Iraq, Aznar propone que la Alianza defina con claridad su nuevo y común enemigo, el terrorismo de origen islamista y la contraproliferación de armas de destrucción masiva.
La Alianza Atlántica del futuro
Definir el nuevo objetivo
Terrorismo islamista
Contraproliferación de armas de destrucción masiva
Desarrollo del concepto de Seguridad Interior
Reuniones del Consejo Atlántico
a nivel de ministros de Interior
Creación de un mando funcional contraterrorista
Integrar fuerzas de seguridad de naturaleza militar
Creación de un sistema continental
de detección temprana
Creación de un sistema común de proteccióncibernética
Extender la democracia en las
operaciones de la OTAN
Creación de un mando para la coordinación de los
programas para la ampliación de la democracia
Constitución de un fondo común para financiar
estas misiones
Crear una Asociación para la Libertad.
Ampliación
Invitar a adherirse a Israel, Japón y Australia
Poner en marcha una asociación
estratégica con Colombia e India
Seguridad interior. Este objetivo se ha manifestado contra todo el mundo occidental desde el 11-S en EE UU, y después en salvajes atentados que se han sucedido en todo el planeta y contra intereses del mundo libre y las democracias. Bali, Madrid, Londres y Amán son sólo una pequeña muestra de la envergadura del nuevo enemigo.
Aznar sugiere enfocar el problema con el desarrollo de un componente vital en esta batalla que es el de la seguridad interna del espacio OTAN con reuniones del Consejo Atlántico (las reuniones permanentes
de los países miembros) a nivel de ministros de Interior para coordinar más efectivamente la información
contraterrorista.
Además, el ex presidente del Gobierno plantea centralizar el trabajo en un mando contraterrorista que recabe información y promueva acciones seleccionadas de naturaleza militar. También se insta a la creación de un sistema común de protección cibernética al constatar la fortaleza de estos medios en la planificación de los últimos atentados islamistas internacionales.
Con esta medidas, se pretende que Europa no quede aislada del esfuerzo de seguridad interior realizado por EE UU y que en la Unión Europea no se ha plasmado con claridad a la vez que se evita que Washington se desligue del Viejo Continente en esta lucha al contar con sus propios métodos y fi nanciación contra los grupos armados islamistas.
En el plano conceptual, la propuesta prevé la creación de un fondo común para financiar medidas de ampliación de la democracia. Se pretende que, una vez realizada la intervención militar, existan los medios
y la fi nanciación para promover el principal valor de los países de la OTAN, la democracia en libertad. Y
todo pasa, según el concepto de Aznar, por ampliar la Alianza Atlántica con tres nuevos miembros, Japón,
Australia e Israel, y evitar el derecho de veto de un país que actualmente posibilita que un solo miembro paralice una iniciativa aprobada por la mayoría. En opinión de Aznar, estos países mejorarán aspectos operativos de la OTAN en la lucha contra el terrorismo por su dilatada experiencia en este campo.
Para el trabajo, coordinado por el director de política internacional de FAES, Rafael L. Bardají, y el analista
del Grupo de Estudios Estratégicos, Florentino Portero, se han efectuado más de 200 entrevistas a expertos y
políticos tanto en España como fuera de nuestras fronteras. Esta propuesta será también presentada en Bruselas el próximo día 30.