MENSAJE DE IÑIGO GOMEZ RODRIGUEZ

 

 

CON UN BREVE COMENTARIO AL FINAL: INTENTAR SER UN REFERENTE DEMOCRATICO (L. B.-B., 31-3-04, 00:30)

 

Estimado sr. Bouza-Brey:

 

Me dirijo a vd. para comentarle algunos aspectos de su último artículo "¿Y ahora qué?", fundamentalmente su duda enunciada acerca de cerrar su página web. Me gustaría, si me lo permite, extenderme mínimamente en algunas cuestiones que a mi juicio pueden serle de interés. Intentaré ser lo más conciso posible; espero que sepa disculparme si aún así este mensaje le resultase aburrido o excesivamente largo.

 

Antes de entrar en materia me gustaría señalar que soy un entusiasta lector de su página web, con la que me topé hace ya bastantes meses navegando, y que desde entonces siempre estoy al tanto de sus actualizaciones, aunque por falta de tiempo no siempre pueda leer todos los artículos que deja a disposición de los internautas.

 

Dicho esto, me gustaría hacerle saber lo útil que resulta su página y otras como la suya a personas como yo que intentamos informarnos de las noticias por distintos medios de comunicación para poder hacernos una imagen fidedigna de la realidad, o al menos obtener distintos puntos de vista acerca de las cuestiones políticas del momento. Éste es, a mi juicio, uno de los problemas de la actual vida democrática española: la obvia simpatía de los medios por uno u otro partido y la incapacidad de muchos de nosotros, los lectores, que por ser legos en muchas de las materias tratadas no conocemos muchos de los detalles y antecedentes de la noticia, o carecemos de los conocimientos especializados para entender decisiones políticas.

 

Por eso se agradece la presencia de páginas como la suya, sobre todo cuando vd. mismo hace comentarios. Aunque pueda parecerle sectario, he de confesar que le he otorgado más credibilidad a las posturas del gobierno acerca de, por ejemplo el tema de Irak o los separatismos a raíz de leer opiniones alineadas con el gobierno en su página, porque precisamente vd. se declara socialista, lo que le exime del ‘interés partidista’ del que puedan ser sospechosos otros analistas o medios. Quizá no esté de acuerdo conmigo, pero creo que una de las causas de la incomprensión y el rechazo de la ciudadanía hacia las motivaciones del gobierno en el asunto de Irak -a parte del citado desconocimiento de los detalles técnicos, como resoluciones de la ONU y mucha otra información- es la agresividad dialéctica tanto de los miembros del PP como de los medios de comunicación que sí apoyaron la decisión del ejecutivo.

 

Me refiero a que, tanto en este como en otros muchos temas el gobierno ha adoptado una actitud de descalificación hacia la oposición que -aún en el caso de que tuviese razón-  ha dado a muchos ciudadanos una sensación de sentirse sistemáticamente rechazados y casi insultados por su propio gobierno por no opinar como él. Términos como "progre trasnochado", "irresponsabilidad", "deslealtad", la negativa de Aznar a comparecer en el Congreso a explicar su postura cuando declaró sus intenciones de apoyo a EE.UU.,etc. dieron la sensación de que el ejecutivo se afianzó en una posición poco amistosa hacia todos aquellos que no compartían su opinión. Y eso genera rechazo, porque el ciudadano que con toda su buena intención duda de la conveniencia de una guerra, se ve insultado por su gobierno por dudar o pedirle explicaciones.

 

Igualmente, los medios que sí apoyaron la intervención en Irak, es decir, "La Linterna" de la COPE (ahora "La Mañana") y "Libertad Digital" -ambos medios llevados por las mismas personas- hacen gala también de una dialéctica que acaba echando para atrás a muchas personas que acudimos a ellos honestamente a por información. Quiero decir que después de mucho tiempo leyéndoles y escuchándoles acusar a la izquierda de filoterrorista, hablando constantemente de 1934, llamando "antiespañol" a todo el que no conciba España de su misma manera, acusando de "antisemita" a aquél que critica la política de Israel y descalificando todo aquello mínimamente socialista uno acaba perdiendo el interés por dicha información, pues se puede sentir fácilmente insultado por no compartir su visión política. Y se obtiene también la sensación de que defienden al PP contra viento y marea, lo que les hace aparecer como poco objetivos. Con estas credenciales, aunque sus informaciones sean veraces siempre acaban pasando por no serlo, o por ser partidistas.

 

Creo poder decir que no soy el único que ha dejado de acudir a dichos medios de comunicación porque siempre están con la misma descalificación de la izquierda y porque al final aburre de predecible que es, por no decir que uno tampoco es masoquista y no quiere sentirse insultado sistemáticamente por no compartir algunas de sus opiniones. Pierden credibilidad, lo que al final es contraproducente porque son los únicos medios que dieron opiniones distintas que los demás y por tanto nos ayudan a tener una visión completa de la situación. Pero no acudimos a ellos por lo que acabo de explicar, así que la visión no será completa mientras no exista otro medio que tenga ese punto de vista pero cuide mejor las formas.

 

En definitiva, todo este rollo viene a cuento porque lo que creo que realmente necesitamos muchos ciudadanos es una información que:

--esté explicada, es decir, no se limite a dar la noticia, sino que entre en profundidad y nos permita comprenderla a los profanos.

--no sea sospechosa de partidista, porque al final de resta credibilidad, independientemente del “bando” hacia el que se incline el medio en cuestión.

 

Es aquí donde páginas como la suya tienen gran relevancia. Creo que Internet es un medio especialmente interesante por permitirnos acceder a mucha información a cualquier hora del día, información que en muchos casos puede venir directamente de las fuentes originales, si haber pasado por el filtro de los medios de comunicación.

 

Como digo, hay que aceptar el hecho de que la mayoría de los votantes somos absolutos profanos en muchísimas materias. La mayoría de nosotros trabajamos un mínimo de ocho horas al día, a las que hay que sumarles el tiempo dedicado al transporte, la comida, el hacer la compra y las faenas típicas de la casa, etc. En el poco tiempo libre que nos queda intentamos estar con nuestros familiares, amigos o dedicarnos a nuestras aficiones. Si intentamos estar mínimamente enterados de asuntos políticos nos encontramos con una cantidad desmoralizante de datos a analizar. Me refiero a que si, por ejemplo, un ministro tiene a todo un ministerio trabajando, procesando y analizando datos para que él pueda tomar una decisión, es lógico que los ciudadanos no comprendamos el por qué de muchas decisiones, puesto que ni tenemos los conocimientos técnicos necesarios ni conocemos todos los datos.

 

Así que siempre se agradecen informaciones explicadas y no interesadas políticamente. Hace tiempo que vengo barajando la idea de abrir una página en Internet en la que se expliquen, para profanos, temas que están a la orden del día pero que muchos desconocemos en profundidad. Así, tras una labor de documentación, creo que podría hacer resúmenes para legos con títulos como “¿Qué ocurre entre Israel y Palestina?”, “¿Para qué sirve el Senado?” o “¿Qué pasa en el Sáhara occidental?”. Creo que muchos de nosotros tenemos unas nociones muy elementales de estos temas, pero al acudir a foros de Internet en el que hay gente con más conocimientos se encuentra, en muchos casos, con un cruce de insultos y descalificaciones que nos desanima a debatir e intentar aprender.

 

Por tanto seguro que sería positiva la existencia de una página donde los legos pudiesen (pudiéramos) formular preguntas con toda nuestra buena intención como, por ejemplo, “¿Por qué la violencia palestina no puede ser considerada autodefensa?” sin ser llamados “amigos de los terroristas” o algo peor. Posiblemente a ojos de un experto estas preguntas resulten burdas y obvias, pero a los que no somos expertos nos ayudarían mucho a comprender conflictos internacionales.

 

Tengo que confesar que entre otras cosas pensé que, si alguna vez llevaba a cabo esta página web, sería interesante proponerle participar a vd. como experto, como alguien a quien se pudiesen formular preguntas. Quizá el formato más apropiado para estas cosas sea una bitácora.

 

Por si no sabe lo que es una bitácora –y discúlpeme este pequeño inciso si ya lo sabe-, se trata de una página personal en la que el autor escribe una anotación acerca del tema que desee, y permite a los visitantes hacer comentarios al respecto. Las anotaciones pueden ser diarias, semanales o con la frecuencia que desee el autor. Como ejemplos le puedo remitir a  http://www.internetpolitica.com/ , bitácora sobre política; http://www.arcadi.espasa.com/ , en la que el periodista Arcadi Espada analiza la función de los medios de comunicación en la política; http://joegillis.f2o.org/driftwood/ o http://www.lapaginadefinitiva.com/weblog/iwasaki/ como bitácoras que de forma desenfadada mezclan opinión y política sin dejar de lado temas más mundanos, o http://vailima.blogia.com/ , en el que la autora sencillamente trata los temas que más le apetecen, desde arte a literatura pasando por vivencias personales.

 

Si me permite una pequeña crítica, creo que un formato más reducido o de bitácora podrían hacer más atractiva su página. Me refiero a que a veces cuelga muchos artículos de una sola vez, y quizá, si lo que pretende es llegar al lector, sería más eficiente un resumen elaborado por vd. mismo. Como le digo, muchos de nosotros tenemos poco tiempo, y aunque tengamos interés por la política nos cuesta a veces, después de trabajar, ponernos a leer varios artículos en la pantalla del ordenador, sobre todo si nuestro trabajo también transcurre delante de la pantalla o si los textos son muy numerosos o si están en inglés.

 

En fin, para terminar, le doy las gracias por su atención ha llegado hasta aquí y me gustaría decirle que no se desanime porque crea que su trabajo es en balde, que no lo es. A muchos nos es muy útil; otra cuestión es que no vea reflejada su labor en los resultados electorales. Creo que es necesario tener en cuenta que en España hay todavía muy poco acceso a Internet, y de las pocas  personas que pueden usar internet desde casa con una conexión rápida son aún menos las que lo emplean para informarse de política, y dentro de ellas, sólo una porción conoce su página.

 

La Red acaba de empezar y estoy seguro de que en un futuro será lo más habitual emplear Internet para informarse, pero por ahora no es así. Por eso le pido que no se desanime y que reconsidere su decisión de cerrar su página, pues creo que es útil aunque todavía llegue a pocas personas.

 

Como resumen creo que es interesante recalcar que si la sociedad española no ha entendido la delicada situación internacional es porque:

 

1)       carece de fuentes de información que expliquen las cuestiones para los no expertos

2)       los grandes medios de comunicación son partidistas y les resta credibilidad

3)       para colmo, los que sí comparten su visión del combate al terrorismo internacional –tanto políticos como periodistas- son, a mi juicio, extremadamente desagradables y dogmáticos con aquellos que desconocen (desconocemos) el tema en profundidad, lo que a ojos de muchos también les resta credibilidad.

 

En fin, espero no haberle aburrido demasiado al exponerle las razones por las que su página resulta útil. Le pido disculpas por no haber sabido acortar el mensaje, pero creo que la circunstancia requería una explicación en profundidad. Si quisiese comentar alguno de estos temas, no dude en responderme.

 

Un cordial saludo.

 

Iñigo Gómez Rodríguez

 

 

BREVE COMENTARIO : INTENTAR SER UN REFERENTE DEMOCRATICO (L. B.-B., 31-3-04, 00:30)

 

Estos días he recibido algunos mensajes animándome a continuar con mi sitio web. He decidido incorporar este de Iñigo Gómez aquí porque creo que refleja bastante bien para qué puede servir mi trabajo.

Pero antes de desarrollar un comentario sobre él permítanme revelarles algunos rasgos biográficos personales, para que puedan  juzgar más a fondo mis opiniones y mi posición actual:

En el curso 63-64, cuando estudiaba segundo de Derecho en Santiago, ---¡ hace ya de aquello cuarenta años, mamma mia!--- me sumé a unas cuantas personas más en la fundación del Partido Socialista Gallego, junto con Beiras, García Bodaño, Rodríguez Pardo, Salgueiro Armada y algunos más.

Por lo que a mi respecta, manifestaba mi compromiso en la actividad del movimiento estudiantil universitario, de vez en cuando hacíamos algunas reuniones de partido en Vigo, pero muy poca cosa más durante aquellos años iniciales. Mi objetivo era el estudio, y aunque nunca fui un alumno de excelente currículum académico, sí que estoy satisfecho de haber aprendido intensamente, sin perder un segundo. Recuerdo aquellas largas noches y madrugadas en las que mi objetivo era no dejar pasar una sola línea sin desentrañarla. Ello me llevaba a ir de un texto a otro en un proceso agotador de estudio de muy diversas materias, tales como el Derecho, la Ciencia Política, la Historia, la Sociología, la Economía, y la Filosofía.

 

Al terminar los estudios y después de un año como colaborador de la cátedra de Derecho Político, un Rector franquista me puso el veto para poder continuar como profesor en el futuro, por lo que en el año setenta me vine a la Universidad de Barcelona, pues Cataluña en aquella época estaba en la vanguardia de la lucha por la libertad.

 

Dos o tres años después ingresé en Convergencia Socialista de Cataluña, fundando al mismo tiempo la ASU junto con otros compañeros PNNS, Numerarios  y Estudiantes.

 

Posteriormente, participé desde CSC en el proceso de fundación del PSC, hasta que muchos años después ---creo que en el 87 u 88--- abandoné el partido cansado del intenso nacionalismo existente en él. Llegué a preguntarme si aquél era un partido socialista o  no, y concluí   que arrastraba demasiadas rémoras nacionalistas para serlo. Por ello  lo dejé.

 

Así, que, como ven, actualmente soy un socialista sin partido de cuarenta años de antigüedad, cuya única ambición política es ayudar a interpretar la situación del país y contribuir con ello a su desarrollo. Y después de tantos años, para mí el socialismo sigue definiéndose como la realización de un esfuerzo constante por la consecución de la libertad, la igualdad y la democracia para todos los seres humanos.

Pero estos valores han de realizarse manteniendo la conexión de sentido y la coherencia entre fines y medios: no es posible realizar estos valores con medios viles e innobles, que los tiñen de corrupción  e imposibilitan su realización.

 

No obstante, aquellos principios morales de los romanos de "neminem laedere","honeste vivere" y "suum cuique tribuere", que en el nivel humano individual resultan pautas que pueden orientar consistentemente el comportamiento, no se pueden trasladar mecánicamente al nivel del comportamiento colectivo, pues ello produciría en muchos casos resultados contrarios a los perseguidos. La distancia entre hechos y valores, en el ámbito colectivo, no se puede rellenar con comportamientos autocentrados en la lógica de la moralidad individual, o en la lógica de las convicciones meramente ideales, pues ello conduciría a consecuencias dañinas. La práctica política consiste en un delicado trabajo de orfebrería, en un complejo equilibrio de interacciones y expectativas, que hay que tejer con sumo cuidado para conducirlo hacia la realización de los valores con sentido del equilibrio, la oportunidad, el honor y el amor.

 

Estas son mis convicciones morales e intelectuales, que me llevan a considerar el socialismo como un esfuerzo que eleva la calidad del ser humano si se hace coherentemente, pero que la puede degradar si las palabras que designan los valores se instrumentalizan al servicio del oportunismo, el sectarismo, la mentira y el populismo o la demagogia.

 

Por eso, entrando ya a comentar el mensaje de Iñigo Gómez Rodríguez después de este largo preambulo, lo que quiero manifestar es que los resultados de las elecciones me han desanimado y preocupado, al alertarme del peligro de un gobierno débil sin mayoría suficiente y sometido a presiones peligrosas para la estabilidad y el desarrollo del país. Pero también, y principalmente, me ha desmoralizado el comportamiento seguido para llegar al poder, que reúne todas las características del párrafo anterior. Así que creo que estamos ante un gobierno débil del PSOE, que puede transformarse en un partido, además de dividido, sometido a la degeneración del populismo y la demagogia.

 

Ello me ha llevado a alejarme mucho más que antes de mis afinidades políticas, y a reorientar mi actuación hacia  la defensa inquebrantable y honesta de la verdad y la racionalidad políticas, como el fundamento imprescindible para evitar la degeneración y corrupción de la democracia.

 

Eso deseo que sea este sitio web, un punto de referencia democrática que suscite confianza y ayude a construir  puntos de vista razonables para el debate democrático. Así creo que podrá servir a personas como Iñigo a orientarse  y decidir con más conocimiento que antes de leer mis páginas.

 

Pero uno tiene sus límites, temporales y energéticos, y seleccionar y comentar lo que parece mejor de entre el inmenso flujo de información que constituye la opinión pública es un trabajo muy arduo, que a veces exige tomarse un respiro para recuperar fuerzas.

 

Y en eso estoy, descansando en la realización de un trabajo no tan apremiante, como es la elaboración de un artículo sobre las relaciones internacionales que espero publicar pronto. Cuando lo haya hecho volveré al mantenimiento de esta web, aunque con una actitud mucho más crítica hacia la izquierda que la mantenida hasta ahora. Siento que están degenerando, y me preocupa y duele mucho.

 

También, partiendo de estas convicciones democráticas, permítanme recomendar a los medios de comunicación mencionados por Iñigo, y al PP, que analicen las observaciones que éste hace en su mensaje. Creo que son bastante atinadas.

 

 Hasta pronto.