MAS DICE QUE SI EL TC ADMITE QUE
CATALUÑA ES UNA NACIÓN DEBE ACEPTAR LA BILATERALIDAD
Informe en “El Mundo” del 03 de mayo de 2008
Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que
sigue para incluirlo en este sitio web.
El formateado es mío (L. B.-B.)
Con un brevísimo comentario a pie de
título:
CONSEJO AL TC:
Lean lo que dice Mas, dejen de ceder y
retroceder siempre, rechacen componendas chapuceras y permítanme una
“Como vengo afirmando hace tiempo, esta
legislatura será constituyente o agónica: me falta información que seguro que
alguien además del TC posee, pero las sentencias sobre el Estatuto de Cataluña
y demás Estatutos que modifican ilegalmente el modelo de Estado tendrán que
salir pronto, y van a darle la puntilla al Estado o a desautorizar a los
Parlamentos autonómicos, con lo cual se abrirá una crisis que afectará a
los fundamentos del Estado y la democracia española. Así que habrá que
ver qué hace el Gobierno y qué hace el PP: ante la futura crisis de Estado,
¿qué se pacta, abrir camino a la confederación cantonalista, la bilateralidad,
la usurpación de competencias al Estado, las políticas lingüísticas
antidemocráticas, la exclusión étnico-cultural derivada del proceso de
“construcción nacional”, la legitimación del terrorismo, la aceptación del
nacionalismo antidemocrático, la insolidaridad fiscal, la desigualdad entre los
españoles, los privilegios de unos territorios sobre otros?, ¿o se pacta volver
a empezar para resolver todo este lío, a partir de principios democráticos
claros y políticas de consenso articuladas por un pacto global de Estado, al
menos entre el PSOE y el PP que cierre el modelo territorial, acabe con el
terrorismo y ponga al caciquismo y el cantonalismo en su sitio? (L. B.-B.,
29-4-08)
L. B.-B., (4-5-08, 7:30)
La mayoría de las
formaciones políticas optan por la prudencia y esperan a conocer el fallo
BARCELONA.- La clase política catalana se aventuró ayer a reaccionar sobre la
hipotética posición del Tribunal Constitucional, relativa a que se acepte en el
preámbulo del Estatuto de Cataluña el concepto de nación, aunque sin tener
todavía claro cuál es la posición de los magistrados.
Estas
son las principales reacciones políticas:
Artur Mas (CDC).-
El
presidente de CiU se refirió al tema minutos antes de inaugurar el congreso de
la Juventud Liberal Europea en Barcelona. El líder convergente subrayó que
aceptar Cataluña como nación implica la bilateralidad en las relaciones entre
Generalitat y Estado. «No tendría sentido que se
reconociera a Cataluña como una nación» si no le es posible «hablar de tú a tú
con el Estado al cual pertenece», sentenció Mas. Del mismo modo, destacó que la
bilateralidad es básica en temas como la financiación, para que Cataluña no
tenga que estar siempre mezclada con «el café para todos de las otras
Comunidades Autónomas» y aspire a tener una negociación bilateral en materia
financiera. No obstante, Mas añadió: «Ojalá el término nación sea reconocido y
aceptado. Creo que esta triple combinación entre nación en el preámbulo,
símbolos nacionales en el articulado y derechos históricos de Cataluña nos
parece muy interesante y favorable».
Francesc Homs (CDC).-
Uno
de los padres del Estatut, suscribe las palabras de Artur Mas. «Pero, por lo
que sé, esto es sólo el inicio del debate, que está abierto, puesto que no hay nada
definitivo ni ninguna decisión tomada», dijo Homs a EL MUNDO. Para Homs, que es
uno de los integrantes del sector soberanista de Convergencia, «la actual
redacción del Estatuto permite convivir a las diferentes sensibilidades dentro
del Estado. Era un buen punto de encuentro. Pero si se impone una de las
partes, imposibilita esa convivencia. En otras palabras, se rompe el pacto
político. Dejemos que los juristas hagan su trabajo y esperemos que nadie
imponga nada», dijo.
Duran Lleida (UDC).-
En
las filas de Unió, se quiere ser prudente. Fuentes de este partido consultadas
por EL MUNDO subrayan que su líder, Josep Antoni Duran Lleida, siempre ha dicho
que hay que respetar las decisiones judiciales. Asimismo, ha mostrado su
confianza en que el Estatuto pasará la criba del TC porque se ajusta a la
Constitución. En último extremo, si el texto de la norma sufre grandes
recortes, «sería necesario que los partidos políticos se sentasen en una mesa
para reflexionar».
Celestino Corbacho (PSC).-
El
ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, en declaraciones a una emisora de
radio, señaló que «sería una muy buen noticia [que el TC avalase que Cataluña
es una nación]. Espero que ahora no comience la discusión sobre los efectos
jurídicos, porque ser o no ser una nación es un tema de sentimientos».
Antoni Castells (PSC).-
El
consejero de Economía de Cataluña fue más escéptico al referirse al tema. Dijo
que el Estatuto está «plenamente en vigor» y que no hará «especulaciones» sobre
las deliberaciones del Tribunal Constitucional hasta que esta institución emita
la sentencia definitiva. Castells insistió en que las deliberaciones del alto
tribunal son secretas y que si se realizan recortes tan importantes como para
que dejen la norma «desnaturalizada» se crearía una situación «compleja».
Joan Ridao (ERC). -
El
portavoz de ERC señaló a EL MUNDO que «el preámbulo no tiene valor jurídico y
así se ha dicho en varias ocasiones. Y al no tener valor normativo, sino
declarativo, no influye para nada en el texto de la norma. Eso, además de que
la figura de 'nación' la introdujo el propio Artur Mas». La matización más
importante, a juicio de Ridao, es la que hace referencia a la bilateralidad de
las relaciones entre Estado y Generalitat. En este punto, el portavoz republicano es rotundo: «Si se elimina el concepto de
bilateralidad, supone un retorno a la época anterior al Estatuto del 79. Sería
un golpe muy duro que dejaría al nuevo Estatuto en los huesos, ya que
provocaría la eliminación de los títulos V y VI, que hacen referencia a la
financiación y a las relaciones con el Estado».
Dolors Camats (ICV).-
En
las filas de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), se defiende también la
constitucionalidad del texto. La portavoz parlamentaria en Cataluña subrayó
ayer que todo el texto «es constitucional» y apostó por abordar el tema con
prudencia, ya que no hay una sentencia definitiva. Camats dijo estar de acuerdo
con el hecho de que el preámbulo no tiene valor jurídico pero reconoció que la
inclusión de la definición de Cataluña como nación «tiene efectos a la hora de
interpretar la norma».
José Domingo (Ciutadans).-
El
diputado dijo ayer a EL MUNDO que «la filtración» de los debates del Tribunal
Constitucional le parece «precipitada». Además, desconfía de que realmente se
acepte la redacción actual del preámbulo del Estatuto: «Puede ser un globo
sonda más que una certeza». En cualquier caso, la posición de su partido sobre
este asunto no ha variado: «De confirmarse el contenido de las informaciones,
nosotros seguiremos creyendo que la definición de Cataluña como nación no es
constitucional», dijo.
Daniel Sirera (PP).-
El
presidente del PP catalán instó ayer al resto de formaciones catalanas a
«acatar la ley» de confirmarse las intenciones del TC de dejar sin efecto
jurídico la definición de Cataluña como nación. Sirera cree que las
consideraciones emprendidas por el Alto Tribunal sólo pretenden «salvar la
cara» de la Generalitat y del Gobierno de Zapatero.
Este texto se ha elaborado con la información de Belén Parra, Daniel
García y Sergio del Amo.